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Por: Rolando Alvarenga
Ahora que varias federaciones han realizado una petición a la Asamblea Legislativa de modificar la Ley General de los Deportes, se presentan una buena oportunidad para incluir en dicha ley un artículo que, “para efectos de cuentas claras y transparencia exigida por las leyes de este país”, establezca que el Comité Olímpico debe estar sujeto a una fiscalización integral.
Y es que recientemente un personaje olímpico denunció que con las modificaciones solicitadas a la Ley de los Deportes se estaría atentando contra la autonomía de las federaciones. Pero ¿Y dónde queda la autonomía de todas las federaciones cuando este Comité no les rinde cuentas claras en Asamblea Ordinaria sobre la ayuda económica internacional recibida y que termina repartiendo entre un reducido grupo de allegados? Por autonomía ¿no tienen derecho a saber las federaciones estas cifras con documentos sobre la mesa?
Y cito un ejemplo, hace un par de años ODEPA estaba otorgando 100 mil dólares anuales para la preparación de atletas y otros gastos, pero este Comité se lo tenía bien calladito, hasta que Melecio Rivera, presidente del Tenis de Mesa y cercano a ODEPA, echó la sopa y reveló este secreto que se tenía bien guardado la cúpula del Comité. Revelación que no dejó de indigestar a varias federaciones tan necesitadas de recursos para sus planes de trabajo.
Entonces ¿Cuánto destinan anualmente para El Salvador el COI, Solidaridad y los patrocinadores? ¿Explica detalladamente el Comité a las federaciones estos ingresos o solo escuchan un informe final de cuentas? O será que en estos casos, en nombre de la discrecionalidad, la autonomía termina como cero a la izquierda ¡no se vale! y en el marco de la autonomía las federaciones tienen derecho a pedir cuentas.
¿Qué yo ando perdido porque los fondos económicos internacionales no están sujetos a ser fiscalizados? ¡A qué bonitos! entonces que se estipule en la Ley de los Deportes que si este Comité no quiere rendir cuentas de sus ingresos a sus federaciones, que pague con este dinero todo lo que implica preparar un contingente para los Juegos del Ciclo Olímpico y compromisos afines. Lo anterior incluye personal técnico, administrativo, implementos deportivos y escenarios en donde se practiquen deportes olímpicos. ¡No con impuestos del pueblo!
Y sí por lo anterior nuestro deporte es desconocido por el COI ¡bienvenido! ¡Que lo haga!, total, para la chulada de deporte que tenemos, a nadie le haremos falta. Además, creo que después de la vergüenza previa a los Juegos Olímpicos Río 2016, en donde el COI no tuvo los hue…sos para sacar al resto de atletas dopados rusos y le tiró la papa caliente a las Federaciones Internacionales, no puede tener cara para estar pensando en sancionar a la potencia cuscatleca.
Y aprovechando la petición hecha a la Asamblea, sería bueno que de una vez se estipulara en la Ley de los Deportes, con copia a la SIP, que ningún Comité Olímpico tiene la atribución de recurrir a la condenable mordaza olímpica. Es que no es justo que mientras en el país el periodismo está haciendo trascendentales denuncias y revelaciones sobre escándalos socio-políticos, la gente no conozca los secretos de la “Caja de Pandora” que están en dos CD.
*Los conceptos vertidos en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien los presenta.
