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Josefina Pineda de Márquez
Maestra normalista
Con las nuevas tecnologías y en relación al uso del idioma nos sentimos cayendo en un despeñadero. Sí, así lo siento.
Usar estas máquinas es entrar a un duro estado de “desorientación” Nuestra gente se mueve en la ignorancia, pesadez, vulgaridad y odio de los que escriben.
¿Hasta dónde irá a llevar este irrespeto e indecencia al escribir en estas máquinas?
A los tuiteros, me los imagino enfermos, perversos, con odio terrible. La ortografía casi es lo de menos. Es una actitud que asusta. Odian, insultan, mienten, en unos diez años serán una sociedad que se odia a sí misma, incapaz de una vida en armonía con sus semejantes.
Por supuesto: Hay honrosas excepciones.
El nivel de los que escriben en los mensajes de Fb me parece que es algo bajo o quizá un trabajo hecho a la carrera, en cualquier momentito y escriben boberías. Ej.
¿Cómo se escribe: Porsupuesto o por supuesto?
Sin ninguna duda a los viejos nos preocupa que nuestros niños y jóvenes sean tan malcriados, irascibles, ofensivos y parece que si han ido a la escuela NO HAN APRENDIDO A VIVIR ENTRE SUS SEMEJANTES.
La palabra POLÍTICA que de vulgar u ofensiva no tiene nada la han convertido muchos en “asqueroso vocablo”
Pero estudiando la palabra por su etimología y por la evolución que se le ha dado en la historia. Sabemos que:
POLÍTICA. Viene del griego. La ciudad donde se establecieron fue llamada POLIS y a esa ciudad había que mantenerla lo mejor posible. Limpia de todo lo malo o sucio, con belleza, con alegría, amor hacia las artes, hacia lo elevado. POLÍTICA era el trabajo honesto, inteligente y amigable de los que tenían la dirigencia. El trabajo del POLÍTICO debe ser respetable y un político no podría ser cualquier persona y menos un desalmado, ladrón o mentiroso.
• Si en cada salvadoreño se apreciara a un político honesto. ¡Viviríamos en nuestro paraíso!
• La palabra POLICÍA viene también de la raíz griega: El policía pues es un amigo de la ciudad.
• Todos los que tenemos una ciudad, país, república o nación debiéramos ser POLÍTICOS y poder vivir en verdadera comunidad feliz.
De Pedro Páramo – Juan Rulfo. (México)
“––Don Pedro, la mamá murió al alumbrarlo. Dijo que era de usted. Aquí lo tiene.
Y él ni lo dudó, solamente le dijo:
––¿Por qué no se queda con él, padre? Hágalo cura.
––Con la sangre que lleva dentro no quiero tener la responsabilidad.
––¿De verdad cree usted que tengo mala sangre?
––Realmente sí, don Pedro.”
Hasta pronto.
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