Mirna Jiménez
Dario Co Latino
El expresidente de la República, hospital Mauricio Funes, considera sospechoso que los grandes medios de comunicación escritos estén dedicando sendos espacios y titulares a la presunta compra irregular de lotes por parte del presidente del Órgano Legislativo, Sigfrido Reyes, mientras que del caso Flores no han hecho lo mismo.
“Sospecho que en el fondo hay una clara estrategia de desgaste electoral del partido ARENA, a la que se han prestado algunos de sus dirigentes como Ernesto Muyshondt, o varios diputados, como Vicente Menjívar, quien presentó una alocada solicitud de destitución del presidente de la Asamblea, cuando aún no ha sido oido, ni vencido en juicio”, argumentó Funes.
Durante su recién inaugurado programa “Sin Censura”, transmitido los jueves en Radio La Chévere, Funes dijo que hay que ver con cautela el caso de Reyes, aunque recomendó al legislador y al partido FMLN dar una explicación de las acusaciones para no seguir generando especulaciones.
Aseguró que como hasta el momento no hay una versión oficial del legislador ni de su partido, él tiene que retomar lo que ha escrito La Prensa Gráfica para opinar al respecto. No obstante, Funes cuestionó más que todo al Diario de Hoy y la Prensa Gráfica, medios de comunicación que han guardado silencio en el caso Flores aún cuando el mismo expresidente se incriminó con sus declaraciones en la Asamblea Legislativa, recordó.
Aclaró que ha dado su postura al respecto aún cuando considera que no es la persona indicada para hacerlo, porque no le cabe duda que es una fina estrategia del partido ARENA con fines electoreros, que al mismo tiempo le servirá a los areneros para tirar una cortina de humo en el caso Francisco Flores.
Recalcó que sobre el proceso judicial de Flores, los grandes medios de comunicación escritos, nunca dieron titulares consecutivos como ha ocurrido está semana contra Reyes.
“Por el contrario, las investigaciones de la comisión especial legislativa y de la misma Fiscalía General de la República (FGR) fueron invisibilizada por la mayoría de medios de comunicación y el caso de medios escritos a páginas interiores que nadie lee”, denunció Funes.
Asimismo, señaló que nunca escuchó a FUNDE, ANEP, ASI, exigir que se judializará el caso como hoy están diciendo algunos representantes que lo sucedido con Reyes puede traer problemas con los cooperantes. “¿Y cómo que el caso Flores, que implica un desvió de varios millones de dólares procedentes de la cooperación taiwanesa para otros destinatarios no va a tener repercusiones internacionales especialmente en materia de cooperación?”, se preguntó.
Por otro lado, el exmandatario se refirió al tema del bajo crecimiento que enfrenta el país y recalcó que El Salvador no se está enfrentando a un fenómeno nuevo que pueda atribuírsele a gobiernos de izquierda y recalcó que problemas económicos y de delincuencia no es exclusividad del país y la mayoría de naciones latinoamericanas también los experimentan.
Según Funes, en los últimos 30 años se ha mantenido el problema de lento crecimiento. Algunas explicaciones van en dirección a que se ha tenido un entorno internacional desfavorable, como también por una baja inversión privada registrada hasta la fecha en El Salvador.
Para el exjefe de Gobierno, mientras la inversión privada siga siendo baja, el crecimiento de la economía local no alcanzará el crecimiento que necesita, por más esfuerzos que haga el gobierno para llevar bienestar a las familias salvadoreñas.
Funes retomó datos de una encuesta elaborada por La Prensa Gráfica que sugiere, entre otros aspectos, que un 69% de la población considera que el rumbo del país no es el correcto y que más del 70% considera que la inseguridad es el primer problema del país.
“La verdad que las cifras no constituyen nada novedoso en el debate público, que los salvadoreños no conozcamos hasta ahora, y sostengo esto porque tanto los problemas económicos como de seguridad que enfrentamos no son de hoy, ni exclusivos de nuestro país”, afirmó.
De acuerdo a Funes, el gobierno está haciendo su tarea aunque no se puede negar que falta mucho por hacer, pero para eso dice el expresidente, se necesita de más recursos, y es eso lo que reclama la población. “La población lo que está diciendo es que no se está haciendo lo suficiente para lograr que la economía despeje, para que se genere más y mejores empleos y mejoren las condiciones de salud y educación en nuestro país”, consideró.
No se trata, según afirmó, de un llamado de atención solo para el gobierno central, es una exigencia para todos los autores tantos políticos como económicos y sociales. Es un llamado de atención, de acuerdo con Funes, también para las alcaldías, los diputados, los administradores de justicia, para el ministerio público, los partidos políticos, empresarios y sindicatos.
El que haya más de un 60% de población, según la encuesta de ese periódico, que no esté de acuerdo con el rumbo que lleva el país, no implica que deseen regresar a ser gobernados por la derecha, considera Funes, quien dijo que la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), aseguró que la economía puede crecer al 2.5% para el próximo año, que es una taza superior al promedio de América Latina y una proyección parecida a la que tiene el gobierno salvadoreño.
Estas perspectivas suenan confiables a partir de varias situaciones, de acuerdo con Funes. Primero porque se espera que mejore la economía en Estados Unidos, además de que mejorará las exportaciones. Otro punto de optimismo lo genera el hecho de la inversión pública especialmente en infraestructura en salud pública y educación, aumentará en 2015 a partir del nuevo presupuesto general de la nación que incluye aumentos en esos rubros.
Funes mantiene además la esperanza de que la correlación de fuerzas en la Asamblea Legislativa en el nuevo período 2015-2018 será similar a la actual, según se desprende de la última encuesta dada a conocer por La Prensa Gráfica, por tanto se podrán llevar a cabo muchos proyectos de ayuda y lograr la gobernabilidad del país, afirma.
“Ninguna fuerza política tendrá mayoría simple de 43 diputados. De modo que para tomar decisiones en las próxima legislatura ambos partidos mayoritarios deberán buscar el apoyo de otras fuerzas parlamentarias y esto los obliga a negociar y en la medida que negocian se evitan excesos y posiciones extremas”, sostuvo.
En consecuencia, planteó Funes, con esa correlación de fuerzas la amenaza de una oposición irracional que trabe al gobierno acabará como una estrategia fallida, que el mismo pueblo se encargará de echar al cesto de la basura, advirtió.
Funes afirmó que para ver con más optimismo el futuro del país es necesario que el partido ARENA y algunos sectores empresariales como la dirigencia de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), que en los últimos tiempos han centrado sus esfuerzos en buscar el desgaste electoral de este Gobierno “bloqueando cuanta iniciativa proviene del Ejecutivo”. “Una cosa es ser oposición y otra cosa es que el oficio sea hostigar, bloquear y frenar las carretas del Gobierno a fin de asegurarse réditos electorales”, advirtió. En tal sentido, también cuestionó que desde la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), se esté bloqueando la obtención de fondos por parte del Ejecutivo. Se refirió a la decisión de esa entidad de suspender la implementación de la amnistía fiscal que permitiría al Estado obtener 40 millones de dólares en el presente año.