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Río de Janeiro/dpa
Ídolos del fútbol brasileño como Carlos Alberto Torres y Zico reclamaron que el delantero Neymar no sea más capitán de la «canarinha».
«Si yo fuera el técnico, mi primera medida sería pedirle a Neymar que tenga la humildad de devolverle el brazalete de capitán al entrenador para que pueda elegir a otro jugador», dijo Carlos Alberto Torres, conocido como Capita, quien fue capitán de Brasil en la conquista del Mundial de México 1970.
El puesto de capitán «no combina» con el delantero del Barcelona, agregó, en declaraciones realizadas hoy durante el programa SporTV.
El comentario de Torres tiene lugar en un momento de profunda crisis del fútbol brasileño. La selección quedó eliminada en forma precoz de la Copa América Centenario y está momentáneamente fuera del Mundial de Rusia 2018.
Los malos resultados llevaron a un nuevo cambio de entrenador. Carlos Dunga fue destituido y se espera que sea reemplazado por Tite.
El domingo, durante el programa «Esporte Espetacular», de la TV Globo, Zico, otra referencia del fútbol nacional, opinó sobre Neymar: «No le veo ninguna condición de ser capitán de la selección brasileña».
«Está mostrando un desequilibrio muy grande, tal vez en función de eso. Él tiene que jugar a la pelota, tiene que ir y jugar. Hay gente que nace para comandar, para liderar, para asumir ese tipo de responsabilidad. Neymar no», enfatizó.
En marzo, antes de que Brasil cayera al sexto lugar en las eliminatorias sudamericanas y de la eliminación en la fase de grupos de la Copa América Centenario, Mario «Lobo» Zagallo había opinado que Neymar «no tiene la madurez que debería tener» para ser capitán.
«Me gusta mucho (Neymar). Es un jugador fuera de serie, tiene todo para subir aun más, pero tiene que tomar conciencia de que está en el comando de la selección brasileña», dijo entonces el cuatro veces campeón mundial, de 84 años.
El malestar de Brasil con quien pese a las críticas sigue siendo la estrella solitaria de la selección pentacampeona del mundo tiene que ver con su magro desempeño dentro de la cancha, muy por debajo del que exhibe en el club español; la acumulación de amonestaciones que lo dejaron fuera de partidos importantes; y el dejarse ver en fiestas y trasnochadas después de quedar fuera del plantel o después de que Brasil quede eliminado de un torneo.
El «problema Neymar» es uno de los varios que deberá afrontar el nuevo entrenador, quien ya renunció al Corinthians para asumir la selección, pero su contrato todavía no fue anunciado en forma oficial por la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).
Si todo se da como está previsto, Brasil debutará bajo el comando de Tite el 2 de septiembre ante Ecuador, en la altura de Quito, y luego se medirá el 6 de ese mes ante Colombia en la ciudad amazónica de Manaos. Ambos partidos son válidos por las eliminatorias hacia Rusia 2018 y serán claves para que Brasil evite quedar por primera vez en su historia fuera de un Mundial de fútbol.
