Tomado de UNIVISIÓN
La Guardia Costera de EEUU informó en rueda de prensa que sigue en marcha la operación de búsqueda y rescate del sumergible Titán en el área donde fueron escuchados sonidos ayer martes, pero que es imposible en este momento determinar el lugar exacto en un área del Atlántico Norte dos veces el tamaño del estado de Connecticut.
«No sabemos dónde están», dijo el capitán de la Guardia Costera Jamie Frederick.
Las autoridades indican que siguen analizando los sonidos detectados el martes, pero que la búsqueda se concentra «en el área correcta» y que están haciendo un gran esfuerzo «con el personal más capacitado».
Frederick afirmó que el área de superficie de búsqueda se ha expandido. Agregó que los grupos de rescate tienen que tener en cuenta los cambios y las corrientes del mar. «Hay una enorme complejidad por el hecho de que está muy lejos de la costa».
La Guardia Costera de EEUU actualmente tiene cinco embarcaciones de superficie buscando el Titán y esperan que haya cinco más en las próximas 24 horas. Hay dos vehículos operados robóticamente (ROV) y se estima que haya ROV adicionales pronto.
Más temprano un portavoz de la Guardia Costera dijo a BBC News que las cinco personas en el sumergible cuentan con menos de 20 horas de oxígeno, lo que significa que el momento clave será en las primeras horas del jueves.
«Aún hay esperanzas»
El capitán Frederick indicó que aún están optimistas. «Tenemos que mantenernos optimistas y con esperanzas mientras seguimos con la operación de búsqueda y rescate», dijo.
«Estamos en medio de un caso de búsqueda y restace. A veces no encontramos lo que buscamos y hay que considerar todos los factores», agregó.
Equipos de rescate que buscan al sumergible desaparecido cerca de los restos del Titanic detectaron «ruidos bajo el agua» en el área de interés.
La comunicación con el sumergible Titán, de 6.5 metros de eslora, se perdió el domingo, casi dos horas después de que emprendiera el descenso hacia los restos del mítico transatlántico hundido, que se encuentran a casi 4,000 metros (13,000 pies) de profundidad a unas 372 millas (600 km) de Terranova, en el Atlántico Norte.