Rolando Alvarenga
@Bachiboxx55
Tras una exitosa trayectoria nacional e internacional de más de treinta años, que incluyó cinco Juegos Panamericanos, De Ying Wang Liang, tenimesista de origen asiático, se retiró el año pasado de la selección mayor, pero sigue de cerca las actividades locales del deporte de la pelota saltarina.
Diario Co Latino la contactó para conversar sobre su destacada trayectoria y la falta de recambio generacional en el tenis de mesa cuscatleco.
– A un año de su retiro, ¿cómo mira el tenis de mesa?
Tras mi retiro de la selección mayor, desde afuera, veo con nostalgia el panorama y más ahora que el Gobierno está apoyando mucho al deporte.
– ¿Cuántos años jugó y cuáles fueron sus principales logros?
Jugué durante 34 años y mis principales logros fueron: oro por equipos en los Juegos Centroamericanos de Tegucigalpa 1990 y El Salvador 1994; plata en dobles en los Centroamericanos y del Caribe Maracaibo 1998; plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador 2002 y bronce en dobles en los Centroamericanos y del Caribe de Cartagena 2006.
También, bronce individual en el Campeonato Latinoamericano de Medellín 2006 y participación en los Juegos Panamericanos de La Habana 1991, Winnipeg 1999, Santo Domingo 2003, Río 2007 y Guadalajara 2011.
– ¿Por qué con el transcurso de los años se terminaron los tenimesistas de alta competencia mayor?
Aparte de ser un deporte de muy pocos participantes, hubo una brecha generacional que no sustituyó a los tenimesistas mayores que estaban destacando.
Por ejemplo, recuerdo que cuando hacíamos equipo con Morayle Álvarez, Sonia Ramírez y De-Hsuan, no había equipos juveniles, solo infantil en ambas ramas. Además, no se detectaron talentos a tiempo y la mayoría dejaron un día el deporte, optando por seguir estudios universitarios.
– ¿Qué tenimesistas nacionales en ambas ramas se le quedaron en la mente?
En masculino, recuerdo a José Carlos Avelar, gran campeón centroamericano, con quien tuve el privilegio de jugar y aprendí mucho por su estilo de juego. En femenino, Mayra Fonseca, campeona centroamericana por trece años consecutivos, a quien no recuerdo haberle ganado ni una vez. Fue un honor haber integrado varias selecciones con ella en compromisos internacionales.
– ¿Cómo ha cambiado el tenis de mesa?
El tenis de mesa es un deporte de mucha concentración, resistencia física, reflejos y, sobre todo, de mucha disciplina. Con los años, nuestro deporte ha experimentado cambios; entre ellos, antes los hules o gomas de las raquetas que podían ser del mismo color; los servicios o el saque no tenían una altura mínima y la pelota era dos milímetros menos.
– Con su valiosa experiencia, ¿aceptaría un cargo como seleccionadora nacional?
Me encantaría, porque me gusta enseñar y es gratificante compartir y transmitir experiencias con las nuevas generaciones.
Además, no puedo porque mi profesión de odontóloga no me deja tiempo, para atender este trabajo con responsabilidad profesional.
– ¿Alguna anécdota que haya marcado su trayectoria?
La participación en un Campeonato Mundial y haber estado muy de cerca de los grandes campeones del mundo en ambas ramas.
– ¿Su mensaje para la gran familia del tenis de mesa?
Cuando pase esta situación de cuarentena, volvamos a la práctica deportiva en lo que más nos guste.
Por salud, debemos hacer ejercicio y espero volvamos a vernos pronto.
Debe estar conectado para enviar un comentario.