Mirna Jiménez
Diario Co Latino
El rector de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) , sick doctor Andreu Oliva, prescription dijo ayer que el país dejó de hacer en su momento reformas sociales que hubiesen evitado la guerra y que se está ante una situación parecida, viagra ya que hay sectores opuestos a una reforma fiscal que podría dar otro rumbo al futuro del país.
“Hay que ver cómo en su momento no se hicieron cosas como la reforma agraria y después tuvo grandes consecuencias, que fue el conflicto armado. Entonces, quizás hoy también no se quiere hacer una reforma fiscal que puede tener también, más adelante, graves consecuencias”, advirtió.
Oliva hizo estas valoraciones en el programa Debate de Canal 35 con motivo del 50 aniversario de la fundación de esta universidad, que en los años de la guerra civil (1980-1992), sufrió el asesinato de un grupo de connotados jesuitas, incluyendo a su rector Ignacio Ellacuría y sus compañeros Segundo Montes, Juan Ramón Moreno, Amando López, Ignacio Martin Baró y Joaquín López y Lopez, además de sus empleadas Elba (madre) y Celina Ramos.
“Quisieron matar a la UCA, pero no lo lograron; siguió adelante y sigue adelante con el legado de los mártires y siendo fiel a la misión propia de la Universidad”, manifestó el padre Oliva, respecto a ese trágico acontecimiento.
Sin embargo, el jesuita reconoció que el asesinato de los seis religiosos y sus dos empleadas, el 16 de noviembre de 1989, el cual fue planificado por altos jefes militares y políticos, y ejecutado por un comando de soldados del batallón Atlacatl, fue “un golpe duro” para la universidad.
Para recuperarse de ese impacto, la UCA recibió el apoyo internacional de la Compañía de Jesús que aportó tanto personal como recursos materiales para que la institución saliera adelante luego de la eliminación de ese grupo de intelectuales que constituían la cabeza de la institución académica.
La universidad logró sobreponerse con la creación de una serie de instituciones como el Instituto de Derechos Humanos (IDHUCA) que en sus primeros años de dedicó a investigar la masacre del 16 de noviembre de 1989, la radio YSUCA, el Centro de Audiovisuales, explicó Olivo.
En el campo académico, la universidad ha creado especializaciones en los últimos años para brindar más preparación a sus estudiantes y profesionales. Entre estos se incluyen 13 nuevos posgrados y dos doctorados que no existían en 1989, según el rector.
Oliva consideró que la UCA sigue cumpliendo el objetivo por el cual fue fundada la institución hace 50 años. “Queremos, en primer lugar, seguir conociendo la realidad nacional, dando también nuestro punto de vista sobre el acontecer nacional, señalando soluciones a los principales problemas del país”, manifestó.
Recordó el jesuita que la UCA fue la primera universidad del país que investigó sobre las pandillas y que tuvo un conocimiento profundo de ese fenómeno. “Y si realmente se hubiera escuchado las conclusiones de ese estudio, probablemente la situación de delincuencia, pandilleril no sería como es actualmente”, dijo el rector de la universidad.