Wilfredo Mármol Amaya
Psicólogo
El pasado martes 19 de agosto, sovaldi El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) confirmó que el alcalde de Nuevo Cuscatlán, tadalafil Nayib Bukele, será su candidato para la alcaldía de San Salvador en las elecciones del 1 de marzo de 2015.
Nayib Bukele, es el exitoso fenómeno político de Nuevo Cuscatlán que ha levantado esperanza de cómo es posible mejorar las condiciones de vida de los salvadoreños en escasos dos años y medio de gestión, no hay dudas que tiene la competencia, la fe y visión estratégica para gobernar la ciudad capital.
La esperada primera conferencia, frente a un considerable número de periodistas, el joven empresario y Alcalde Municipal de Nuevo Cuscatlán, Nayib Bukele, fue claro y convincente que su participación es la expresión de la necesidad de un cambio generacional en la política, enfatizó: “ésta no es una elección entre ARENA y el FMLN, ni siquiera entre Nayib Bukele y Norman Quijano, sino que es una lucha del futuro y el pasado, entre las viejas caras de la política y la nueva generación.”
De inmediato se conoció la posición desventurada de Norman Quijano-la expresión de la vieja guardia, soberbia y el autoritarismo en la política nacional- “Nayib Bukele está muy jovencito…”, aseguró Quijano.
Una vez más la verborrea incendiaria de Norman Quijano, típica del quehacer político de antaño y verticalista pone a descubierto la visión ADULTOCENTRISTA de Norman, que en esencia es la NO credibilidad en la juventud, por más que salga dando las explicaciones, como siempre, solo es de recordar los exabruptos que le caracterizan: “el subsidio a los paquetes escolares, uniformes, zapatos y el vaso de leche son un despilfarro”, se atrevió a vociferar Norman en la campaña presidencial.
No es casual la posición del alcalde perdedor de las últimas elecciones, que por cierto van dos al hilo, sino que responde a la forma de ver las cosas del desventurado señor Quijano, como señala UNICEF El Salvador: “A menudo los adultos nos referimos a las y los adolescentes como la próxima generación, o simplemente el futuro. Pero ellas y ellos ya no quieren ser considerados sino como el presente; las y los adolescentes exigen hoy ser escuchados, así como participar en las decisiones en torno a los temas que les afectan, derechos –por cierto– consagrados en la Convención sobre los Derechos del Niño. No es posible olvidar que las y los adolescentes son parte fundamental del presente de nuestra sociedad: viven, trabajan y contribuyen a sus hogares, comunidades, sociedades y economías en múltiples niveles.
Esta visión señor Norman Quijano se denomina ADULTOCENTRISMO, e indica que existen relaciones de poder entre los diferentes grupos de edad que son asimétricas en favor de los adultos, es decir, que estos se ubican en una posición de superioridad. Los adultos gozan de privilegios por el solo hecho de ser adultos, porque la sociedad y su cultura así lo han definido. Por ejemplo, si un adolescente rompe un vidrio por error, recibe una sanción de parte del adulto (grito, reto, castigo o golpes), si este adulto comete el mismo error, no recibe castigo de parte del adolescente e incluso puede asumir que fue un accidente y, en el mejor de los casos, decir que tiene derecho a equivocarse.
Por otro lado es manifiesta la actitud androcéntrica de Norman Quijano, compartida con aquellos que sostienen una visión del mundo que sitúa al hombre como centro de todas las cosas.
Esta concepción de la realidad parte de la idea de que la mirada masculina es la única posible y universal, por lo que se generaliza para toda la humanidad, sean hombres o mujeres, vale agregar que el androcentrismo conlleva la invisibilidad de las mujeres y de su mundo, la negación de una mirada femenina y la ocultación de las aportaciones realizadas por las mujeres.
El adultocentrismo de la mano del androcentrismo son dos cualidades que juntas son fatales para el progreso y la visión de futuro, que conllevan a no creer en los jóvenes, mucho menos si son mujeres.
El Periódico digital La Página, a escasos tres días de la presentación oficial de Nayib Bukele, presenta los resultados de una encuesta y estos son los resultados:
¿Por quién votaría para alcalde de San Salvador?
Nayib Bukele 75% (4,251 votos)
Norman Quijano 22% (1,266 votos)
Otro 2% (133 votos)
El anuncio del candidato Nayib Bukele para futuro alcalde de San Salvador llena de esperanza para entrar a nuevos paradigmas de cómo hacer las cosas, con fortaleza emprendedora, ideas frescas, audaces, con juventud y experiencia, sobre todo en una lucha del futuro y el pasado, entre las viejas caras de la política y la nueva generación.
En este nuevo país en construcción cada vez más civilizado, no hay espacio para la demagogia, visiones derrotistas y de estados fallidos, orquestados por los medios tradicionales de comunicación, la clase empresarial voraz y salvaje, las instituciones clásicas y sus personeros, mucho menos para políticos que aun mantienen muros edificados en sus estructuras mentales.
Los jóvenes, hombres y mujeres de bien, tienen el futuro en sus manos y el próximo 1 de marzo de 2015 la ocasión ineludible para cambiar las cosas.
Nayib Bukele adelante, sin perder de vista la utopía de un país en justicia social, económica, política, cultural y sobre todo más humana como la soñaron Monseñor Romero, Martí, Luna, Zapata, Feliciano Ama, Miguel Mármol, Prudencia Ayala, Carlos Antonio Herrera Rebollo, Ellacuría, Ignacio Martin Baró, Enrique Álvarez Córdova, Manuel Guillermo Ungo, Profesor Gregorio Rigoberto Amaya Lovos, Héctor Oqueli Colindres, Agüinada Carranza, Hernán Vera “Maravilla, Roque Dalton, Mario López, Amada Libertad, Schafik Jorge Handal y la sangre generosa de los mejores hijos e hijas de esta patria nuestra llamada El Salvador.
Que así sea.