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Nosotros en el FMLN seguimos luchando..!

Lourdes Argueta
Comisión Política FMLN

Este miércoles  a la medianoche inicia el silencio electoral de la campaña presidencial y legislativa, marcada por arbitrariedades que empañan todo el proceso y que naturalmente siembran la incertidumbre jurídica de los resultados, tanto por las reformas irregulares al Código Electoral por la bancada cyan, como por la actuación cómplice del Tribunal Supremo Electoral, en la que la mayoría de sus magistrados acatan la resolución fraudulenta de la Sala de lo Constitucional que habilita al actual presidente a buscar la reelección continua, cuando la constitución expresamente lo prohíbe, entre otras irregularidades.

Hemos denunciado y condenado esa arbitrariedad y abuso de poder de las instituciones que servilmente se prestan a la estrategia de concentración y consolidación del nuevo grupo de poder emergente, lo cual debilita aún más los frágiles mecanismos jurídicos para garantizar la separación de poderes en el Estado, y que deja en evidencia la falacia de democracia que pregonan desde la política tradicional.

Vivimos en una dictadura sistémica en la que se impone una concepción elitista, clasista, y obsoleta de poder y democracia, que en la medida se profundiza su desgaste y se vuelve infuncional a los intereses del poder económico y político dominante, recurren a reacomodar las normas jurídicas sobre las que sustentan la forma de ejercicio de poder; todo, en nombre de la democracia.

Esa democracia representativa que ya cumplió su papel en la historia, que dio paso a superar etapas superiores de las relaciones y ejercicio de poder absoluto que imperaba en tiempos antiguos, pero que en esta época moderna en el que vivimos, se ha convertido también en un yugo que frena la liberación real de los pueblos, porque también somete, se impone y establece una concepción y una práctica restrictiva de las supuestas libertades que pregonan los llamados defensores del liberalismo, porque la libertad de cada quien termina hasta donde llega su capacidad adquisitiva.

No podemos desvincular el componente económico de la concepción de poder que se impone, porque son mancuernas inseparables que definen no solo la forma de poder político, sino que condenan a la sociedad a un estatus quo de elites privilegiadas sobre el sacrificio y explotación de las grandes mayorías.

Pero de esto nunca hay tiempo para debatir y profundizar, el calendario electoral nos impone una dinámica acelerada y una mentalidad cortoplacista, en la que hay quienes incluso desde el seno de la izquierda asumen como bandera absoluta, porque reproducen esa concepción estrecha y superficial de la democracia que no permite ver el horizonte y las múltiples formas de construir poder real. Más allá de esfuerzos entre reales y los aparentes, nos embaucamos en agendas impuestas por quienes mueven los hilos del poder dominante, que no ven, pero deciden y definen escenarios donde nos vemos envueltos, y en los que hay quienes o se confunden o se desmoralizan.

La atomización de las organizaciones sociales de izquierda o progresistas, así como los diferentes matices de visiones dentro de nuestro partido, tienen a la base la no cohesión ideológica y no definición del rumbo de este proceso que tiene como misión la transformación de la sociedad, pero que cada quien asume según su interpretación. Este periodo de la historia es a la vez una gran escuela de la que debemos tomar las lecciones necesarias para encontrar juntos las medidas y acciones para un desenlace favorable para las grandes mayorías, y en la medida que unifiquemos criterios y acciones, daremos un gran salto en la lucha, y veremos la superficialidad en la que el sistema nos ha envuelto.

Podrá haber silencio electoral, y podrá finalizar toda la contienda electoral, pero los militantes de izquierda seguimos en la lucha independientemente de los resultados, porque nuestra lucha es desde la visión del poder real, que se construye solo caminando y luchando junto al pueblo día a día, no solo en periodos de campaña, por lo tanto, este día solo se cierra una etapa en la que oficialmente se pide el voto, pero nuestro contacto directo y permanente con el pueblo continua.

Mientras haya pobreza, injusticia, exclusión, marginación y violencia en la sociedad, los militantes de izquierda mantendremos presente que hay una misión por cumplir; y nuestro proceso tiene raíces, no podemos permitir que subestimen la fuerza gloriosa que representa nuestro instrumento de lucha; porque además de raíces, también tiene cabeza, dirección de rumbo que claramente lo encontramos con el estudio de las ideas revolucionarias, que nos permiten ver con luces más altas.

Como partido, contamos con lo más preciado para profundizar nuestro proceso, y es la base noble que ha sido capaz de salir en esta etapa y demostrar que el FMLN sigue siendo una fuerza viva y que luchamos hasta en las condiciones más adversas. Mi reconocimiento especial para cada efemelenista, cada amigo y simpatizante, que han hecho posible que nos sigamos manteniendo en pie, con la frente en alto, con solvencia, moral y ética de quienes abrazamos los sueños de un El Salvador donde valga la pena vivir, con dignidad, como nuestro líder histórico Schafik Hándal lo sostenía, y quien a 18 años de su partida física, sigue presente por la vigencia de su pensamiento revolucionario.

Quienes nos sentimos herederos del pensamiento de Schafik, creemos en un FMLN valiente, trabajador, incluyente, consecuente y coherente con la misión de transformación social, una trasformación por encima de la superficialidad de solo administrar el poder público.

 

Vamos al cierre de un proceso electoral en el que pedimos tú voto por nuestro partido FMLN, como proyecto político, pero también pedimos tu participación activa y protagónica para construir juntos la nueva democracia, real y participativa, por el presente y futuro de nuestra patria.

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