Ciudad de Panamá/Prensa Latina
Un notable incremento este año de la migración irregular a su paso por la selva de Darién, en la frontera con Colombia, preocupa hoy a las autoridades panameñas.
De acuerdo con el más reciente informe del Servicio Nacional de Migración (SNM), de enero a marzo último utilizaron esa ruta rumbo a Estados Unidos unos 87 mil 390 viajeros, siete veces más que en igual lapso del pasado año, cuando cruzaron la jungla 13 mil 796 personas.
Las nacionalidades que predominan son venezolanos, haitianos y ecuatorianos, pero también han identificado ciudadanos de China, India, Chile, Colombia, Brasil, Afganistán, Camerún, Somalia y Perú, indicó el SNM.
Marzo, por su parte, fue el mes que cerró este año con la cifra mayor de migrantes, con 38 mil 99, mientras que febrero totalizó 24 mil 657 y enero 24 mil 634, agregó la fuente.
El comunicado del SNM indicó además que de los que atravesaron Darién en marzo, 30 mil 929 eran adultos y siete mil 170 menores de edad, esta última población de las más vulnerables, lo cual ha suscitado constantes alertas del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Sobre el tema, la directora del SNM, Samira Gozaine, instó a que los diferentes países se pongan de acuerdo para proteger a esos niños, una buena parte de los cuales quedan abandonados en los inhóspitos parajes y sufren vejámenes.
Para algunos organismos nacionales como la Defensoría del Pueblo, el auge del flujo migratorio ha hecho calcular en alrededor de 400 mil personas que podrían pasar en 2023 la selva de Darién, lo que casi duplica a los 248 mil que lo hicieron el pasado año.