Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
Los diputados de Nuevas Ideas se retractaron de no emitir un pronunciamiento público en el marco de la beatificación de los padres, Fray Cosme Spessotto, Rutilio Grande y los laicos, Manuel Solórzano y Nelson Lemus. Pues 7 días después de negar sus votos para un pronunciamiento, este martes en la sesión plenaria aprobaron uno nuevo, solo que ayer, con iniciativa del oficialismo y no de la oposición.
El martes 18 de enero, la diputada Dina Argueta del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), propuso que se emitiera un pronunciamiento en el marco de la beatificación de los dos sacerdotes y dos laicos, pero los oficialistas no dejaron que incluso se leyera, por el hecho de ser presentado por la oposición.
Este martes, la diputada de Nuevas Ideas, Evelyn Merlos, solicitó modificación de agenda para que con dispensa de trámite se avalara el pronunciamiento, esto se aprobó en cuestión de minutos. Mientras que la propuesta como tal, se avaló en horas de la tarde-noche. Estas acciones de no aprobar todas las propuestas de la oposición se ha vuelto una tarea de los oficialistas. De hecho, ni siquiera discuten en las respectivas comisiones las propuestas de los otros grupos parlamentarios que no sean aliados.
El pronunciamiento como tal, que la Asamblea Legislativa aprobó, “reconocen” el legado de fe, amor y esperanza que el padre Rutilio Grande, Fray Cosme Spessotto Zamuner, y los laicos Nelson Lemus y Manuel Solórzano, dejaron al pueblo salvadoreño, como mártires y víctimas del odio al evangelio.
Fue en marzo de 1977 que el padre Rutilio Grande y sus dos colaboradores, Nelson Lemus y Manuel Solórzano, fueron asesinados sobre la carretera que del municipio de Aguilares conduce hacia el municipio de El Paisnal, al norte de San Salvador. Años más tarde, en junio de 1980, Fray Cosme Spessotto, sacerdote de origen italiano, quien por 27 años fue párroco de San Juan Nonualco, en La Paz, fue asesinado mientras realizaba una oración frente altar mayor de la parroquia de la referida ciudad.
Los cuatro fueron beatificados el sábado 22 de enero, en la Plaza Divino Salvador del Mundo, por decisión del papa Francisco, líder de la iglesia católica a nivel mundial.