Hoy hablan que perdimos,
hoy dicen que perdieron
hoy dicen que los castigaron,
hoy dicen que nos
castigaron,
hoy unos se llenan la boca
diciendo que ellos, que ellos
hoy sí resolverán los
problemas.
Lo cierto es que la sangre,
que la sangre sigue rodando,
brotando a borbollones,
en los hospitales el pueblo,
el pueblo sigue esperando
la cura a sus males,
lo cierto es que estamos
mal todos,
pues esperamos que otros nos ayuden,
que otros nos resuelvan
la vida,
cuando ellos sabido es
solo buscan resolver
la suya.
Votaciones van y vienen.
El voto es el instrumento del desencanto para unos
y del encanto para otros,
lo cierto es que sigue siendo
un arma que nos divide más.
El desencanto es con ellos,
con los políticos,
pero no vemos que estamos,
estamos en verdad desencantados,
desencantados de nosotros mismos.
Cuando entendamos que el voto,
que el voto no le da de
comer al hambriento,
no le da salud al enfermo,
no le da educación
al individuo,
no le da paz ni tranquilidad a nadie,
cuando entendamos eso
dejaremos de estar
desencantados.
Mizael Lorka.