@arpassv
El Juzgado Quinto de Sentencia y el pleno de la Corte Suprema de Justicia rindieron, la semana pasada, tributo a la impunidad y homenaje a la corrupción.
El tribunal de sentencia absolvió de responsabilidad civil a los familiares del expresidente Francisco Flores, quienes debían responder por 15 millones de dólares. Según la resolución judicial, la Fiscalía no logró probar al exgobernante arenero el cometimiento de enriquecimiento ilícito, peculado y desobediencia.
Con esta decisión, el sonado “Caso Flores” queda totalmente impune, dado que Fiscalía y Sistema Judicial se niegan a procesar a los “destinatarios” de dichos fondos y no aplican la extinción de dominio al Consejo Ejecutivo Nacional de ARENA (COENA) por los 10 millones que eran para los afectados por los terremotos del 2001, pero fueron utilizados para financiar la campaña electoral del 2004. ¡Bravo, señores jueces y señor fiscal general! (¿con esto el fiscal tendrá asegurada su reelección?).
Por su parte la Corte Plena decidió, con el voto favorable de 9 de sus 15 magistrados, librar de ir a juicio a Luis Mario Rodríguez, exsecretario jurídico del gobierno de Antonio Saca, exprecandidato presidencial de ARENA y exmiembro del COENA. Debía ser procesado por enriquecimiento ilícito, pero los “honorables” magistrados lo ayudaron. ¡Bravo, señores magistrados!
Rodríguez es ahora paladín de la transparencia. Hoy es director del Departamento de Estudios Políticos de FUSADES, principal instancia de la derecha oenegera y tanque de pensamiento de la oligarquía, que exige rendición de cuentas al actual gobierno.
Este falso promotor de la anticorrupción también está demandado por recibir sobresueldos pagados con la partida secreta de Casa Presidencial, pero el fiscal Douglas Meléndez no se atreve a investigarlo (¿para no poner en riesgo su reelección?)
Rodríguez -a pesar de haber sido miembro del círculo cercano de Saca y de aparecer su firma en cheques de pagos irregulares- no corrió la misma suerte de otros exsecretarios presidenciales que están procesados junto con el expresidente (¿por qué no cayó en desgracia con ARENA?).
Las actuaciones del Juzgado Quinto de Sentencia, el Pleno de la Corte Suprema de Justicia y de la Fiscalía son, pues, una oda a la impunidad y un ¡viva la corrupción!