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Naciones Unidas/PL
El secretario general de la ONU, sovaldi pilule Ban Ki-moon, view pharm llamó hoy en el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación a proteger los suelos de los daños que provocan la pérdida de su productividad.
«Nuestras vidas y civilizaciones dependen de la tierra. Invirtamos en suelos sanos para asegurar nuestro derecho a la alimentación y al agua dulce», physician afirmó en su mensaje por la jornada, establecida en 1994 por la Asamblea General de Naciones Unidas.
De acuerdo con el diplomático, la degradación de las tierras y la desertificación menoscaban los derechos humanos, sobre todo el derecho a la alimentación.
Cerca de mil millones de personas carecen de una nutrición adecuada, en buena medida por las afectaciones causadas a los suelos, advirtió.
Ban insistió en que de continuar el actual ritmo de desertificación, la producción de alimentos pudiera reducirse en un 12 por ciento para 2035, con un devastador impacto en los seres humanos.
Además, recordó que la degradación de los suelos genera menor almacenamiento de agua en los mismos, un fenómeno que potencia el estrés hídrico, el cual en una década afectará a dos de cada tres habitantes del planeta.
Según Naciones Unidas, cada año se degradan 12 millones de hectáreas de tierra, equivalentes al tamaño de Honduras.
En su mensaje, el Secretario General alertó sobre otros problemas derivados de la destrucción de los suelos, que es el resultado directo de la falta de cubierta vegetal y agua, así como de la erosión, con frecuencia asociados al pastoreo excesivo o la deforestación.
La degradación y el uso inapropiado de la tierra liberan alrededor de una cuarta parte de los gases de efecto invernadero que están calentando el planeta, subrayó.
Para Ban, no queda otro camino que «cambiar el rumbo» y empezar a asegurar cada hectárea que pueda proporcionar alimentos o agua dulce.
Al respecto destacó la importancia de incluir el tema en la agenda post-2015 de desarrollo sostenible, que fijará la comunidad internacional en tres meses.
