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Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
La Organización de Naciones Unidas (ONU) señaló en un informe oficial que el PIB Regional crecerá sólo un 1.7% en 2023 y un 1.5% para el año 2024, situación que podría agravarse a partir de los impactos del cambio climático.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), publicó su informe anual en el que señala que las “economías de la región” se mantendrán en bajos niveles de crecimiento este 2023 y el 2024, que se ve afectado por un “panorama económico mundial negativo y regional muy complejo”, observaron.
La información está contenida en un documento titulado Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2023 El Financiamiento de una Transición Sostenible: Inversión para Crecer y Enfrentar el Cambio Climático. En el documento se prevé un crecimiento del PIB promedio regional de 1.7% (2023).
Mientras, para el 2024 se espera que tendrá lugar un “leve descenso que llevaría el Producto Interno Bruto Regional a un 1.5%, señaló la CEPAL en su informe.
“La economía y el comercio mundiales se mantendrá en una senda de bajo comercio. A pesar de las caídas en las tasas de inflación se espera que los países desarrollados continúen con políticas monetarias contractivas (a fin de combatir la inflación) por lo que no se prevé una baja significativa en las tasas de interés externas durante este año, y los costos de financiamiento para los países seguirán siendo altos”, explicaron.
“La CEPAL señala que todas las subregiones tendrán un menor crecimiento este año respeto a 2022, América del Sur, crecerá un 1.2%; Centroamérica y México un 3.0%, mientras el Caribe (sin incluir a Guyana) lo haría en un 4.2% en comparación con un 3.7%, un 3% y un 4.2% en 2022, respectivamente”, acotaron.
Asimismo, este organismo reiteró en su mensaje que el año próximo 2024, el contexto internacional continúe siendo “poco favorable”, con un crecimiento del PIB y el comercio mundial muy por debajo de los promedios históricos. “En la región, se mantendrá el reducido espacio fiscal, que pese a la caída en la inflación dejaría más márgenes de maniobra a los países que pueden hacer política monetaria.
La ONU frente a este contexto y la CEPAL reiteraron su preocupación por la calidad del empleo, por su probable ralentización económica y tenga un impacto en los trabajadores y trabajadoras que estarían “expuestos a menores niveles de protección social y a puestos de trabajo”, en sectores menos productivos.
“Ante los desafíos de dinamizar el crecimiento y hacer frente al cambio climático es esencial potenciar la inversión pública y privada. La inversión pública en la región es baja en comparación con las economías avanzadas e incluso respecto a otras de las regiones en desarrollo”, acotaron. “Este reducido nivel de inversión se ha traducido en un acervo de capital público, infraestructura insuficiente para dinamizar el crecimiento económico y promover el desarrollo productivo”, destacó la ONU del informe de la CEPAL.
