Bamako/AFP
El gobierno de Malí y la Misión de la ONU para la lucha contra el Ébola (UNMEER) declararon el domingo finalizada la epidemia en el país, pharm luego de que pasaran 42 días sin que se registraran nuevos casos.
El ministro Ousmane Koné y el jefe de la UNMEER en Malí, sale el doctor Ibrahim Socé Fall, malady hicieron declaraciones por separado difundidas el domingo de noche por la televisión pública maliense ORTM.
«Después de 42 días de vigilancia sin que hayan casos confirmados de Ébola» declaro hoy el final de la epidemia en Malí, dijo Koné, una afirmación que fue confirmada por Soce Fall.
El país «superó» la epidemia, declaró Soce Fall. Por su parte subrayó: «en conformidad con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la materia, la propagación de la enfermedad causada por el virus Ébola en un país puede ser declarada finalizada, en tanto han pasado 42 días sin que se registre un nuevo caso».
En consecuencia, Malí puede ser declarado «fuera de este episodio de la epidemia del virus Ébola», afirmó, saludando a las autoridades malíes y a los diferentes actores en la lucha, por las «semanas de intensa labor» que permitieron llegar a este resultado.
Koné también felicitó al personal de salud de Malí y a todos los colaboradores con el país por los esfuerzos desplegados, exhortando a la población y actores sanitarios «a mantener y practicar las medidas de higiene elementales y los comportamientos protectores», recomendó.
En Malí se registraron siete casos de Ébola. El primero, el de una niña de dos años que provenía de Guinea, uno de los países más afectados por el actual brote de Ébola, que ha provocado casi 8.429 muertos y cerca de 21.296 infectados, según el último balance efectuado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El último paciente en ser tratado por ébola en Malí se recuperó totalmente de la enfermedad y fue dado de alta a principios de diciembre.
Según las autoridades locales y la OMS, el primer caso de Ébola registrado en Malí fue anunciado el 23 de octubre. Se trataba de una niña de dos años que llegó de la vecina Guinea y falleció el 24 sin haber provocado contaminación.
Pero, el virus volvió a ser introducido al país por otro paciente también proveniente de Guinea, un imán de 70 años de edad, quien contaminó directa o indirectamente a siete personas, de las cuales cinco murieron.
Guinea, donde comenzó la actual epidemia a fines de diciembre de 2013, es uno de los países más afectados por Ébola, junto a sus vecinos Sierra Leona y Liberia. Entre estas tres naciones registran el 99% de los muertos a causa del virus, según la OMS, que también ha señalado que el número de nuevos casos ha descendido de manera neta desde hace varias semanas.