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@OscarCoLatino
Un grupo de organizaciones sociales se unieron para integrar el Frente de Solidaridad con el Socialismo, con el objetivo de apoyar las acciones de gobiernos y movimientos progresistas de Latinoamérica que pretenden dejar atrás el sistema capitalista con el que fueron gobernados por muchos años.
El Foro es integrado por la Coordinadora Intergremial “Rafael Aguiñada Carranza” (CIRAC), la Concertación Popular por un País sin Hambre y Seguro (CONPHAS), el Frente Nacional Agrario (FNA) y la Vía Campesina.
Las organizaciones sociales instaron a sus pares de la región a luchar contra lo que consideran una “amenaza común”, ante las posibilidades de que las medidas intervencionistas ejecutadas en Venezuela sean implementadas en otros países de la región.
“Como organizaciones sociales y populares tenemos claro que es un plan diseñado por el imperialismo norteamericano para toda América Latina, hoy Venezuela es el centro y símbolo de resistencia de esta arremetida, después sigue El Salvador, Ecuador y todos los países latinoamericano”, dijo Milton Recinos, representante de la CIRAC.
Las organizaciones que integran el Frente externaron su solidaridad con el gobierno venezolano, por considerar que es víctima de acciones intervencionistas impulsadas por el gobierno de los Estados Unidos, lo que violenta el derecho de independencia y autodeterminación del pueblo de la nación suramericana.
Recinos comentó que el apoyo al gobierno de Venezuela se debe a que “la Revolución Bolivariana impulsada por el comandante Hugo Chávez junto al pueblo hermano de Venezuela trajo consigo cambios importantes en lo económico, político, social y cultural en beneficio de las grandes mayorías”.
Para las organizaciones miembros del Frente, las acciones en beneficio del pueblo impulsadas por el gobierno venezolano son mal vistas por la oligarquía de la nación y por sus allegados en los Estados Unidos. “Por su desesperación por conservar un sistema con sus privilegios hicieron que el gobierno norteamericano diseñara una política intervencionista y agresiva para toda América Latina, pero sobre todo dirigida a los países con gobiernos democráticos, populares y no afines a los intereses de una política de subordinación”, argumentó Recinos.
En ese mismo sentido, Francisco García, coordinador nacional de CONPHAS externó: “no es posible que todavía los imperios mezquinos estén en la lógica de querer intervenir cuando la democracia funciona en los pueblos de América Latina”.
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