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@GloriaCoLatino
William Castillo, prostate representante de la Mesa por la Soberanía Alimentaria, unhealthy demandó al Ejecutivo la declaratoria de una “emergencia nacional”, ante la situación que viven miles de pobladores que dependen del trabajo en las zonas cafetaleras del país.
“Queremos que el CONASAN, como ente rector de la Política Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional, tome en conjunto las medidas necesarias para asegurar el derecho humano a la alimentación”, afirmó.
La declaratoria de un brote grave de roya a finales del año 2012, en el parque cafetero del país, ha llevado a que miles de familias que dependen de la corta del aromático queden sin empleo y, por tanto, sin ingresos económicos que puede extenderse hasta el 2016, explicó Castillo.
“Actualmente, son 8 mil familias ubicadas en 23 municipio de las zonas cafetaleras, empeorando sus condiciones de extrema pobreza, desnutrición y hambre”, dijo. La Mesa por la Soberanía Alimentaria presentó una serie de valoraciones que indican que los salarios que históricamente han recibido en las zonas cafetaleras son los más bajos, con respecto a otras economías y nunca se honró la iniciativa de un sistema de protección social de esta población.
“El ingreso promedio de los hogares vulnerables, ante la roya, fue de 90 dólares mensuales; o sea, un 30% menos al costo de la canasta básica, que los deja sin cubrir sus necesidades básicas de alimentación”, indicó.
Adolfo Hurtado, sociólogo nicaragüense, afirmó en su ponencia que la actual crisis en materia de seguridad alimentaria que afecta a la región centroamericana vendrá a violentar de manera más significativa y prolongada a estos grupos poblacionales.
“Muchos de los cálculos que se discuten están en función de pérdida de la producción de volumen comercial y, cuando se ha hablado de la pérdida, es la cantidad por el precio del café; o sea, con base a los grandes productores, sin una reflexión profunda de este impacto en los grupos más vulnerables quienes se encargan de la corta del café”, explicó.
Para Hurtado, los resultados de la cosecha de 2013-2014 en Centroamérica han sido significativas en el registro de sus caídas en el rendimiento, como efecto directo de la propagación de la roya del cafeto.
“Cuando vemos a Honduras y Guatemala, que han perdido más del 40% (de la producción), y Nicaragua, que ha perdido prácticamente el 70%, es grave, pero no existe un análisis que evalúe la caída de salarios de los cortadores; algunos países de la región reportan hasta un 60% menos a esos de por sí bajos salarios, lo que vendría a generar mayor vulnerabilidad”, indicó.
La Mesa por la Soberanía Alimentaria en El Salvador rechazó, también, cualquier iniciativa que pretenda introducir la siembra de monocultivos como caña de azúcar, eucalipto, piña o palma africana, suplantando el bosque cafetero.
En cuanto a la “tenencia de la tierra”, los representantes de la Mesa por la Soberanía Alimentaria argumentaron la necesidad de romper obstáculos para un desarrollo agrícola equitativo, ya que el 51% de la superficie total del bosque cafetero lo controla un 5% de los grandes productores; mientras un 80% de pequeños productores solo cuentan con un 19% de la tierra.
German Meléndez, originario de Alegría, Usulután, solicitó del gobierno y la Asamblea Legislativa una intervención inmediata para ayudar a las familias que trabajan exclusivamente de la siembra y cosecha del café.
“Si antes pagaban 100 dólares por el mes, ¿con cuánto tiene que vivir esa familia a partir de que pueden ser cinco miembros?, bueno cada miembro de la familia vive con 20 dólares al mes y si lo dividimos por día son sesenta y seis centavos por día, se podrá sobrevivir con esa
cantidad, esa es nuestra realidad”, aseveró.
