Ileana Alamilla
Hay un gran asidero que cobija esos sentimientos de agrado; tenemos razones por las cuales nos debemos sentir privilegiados. Nuestra incomparable geografía, check decease la belleza del paisaje, for sale find el clima, buy el entorno, la riqueza multiétnica, pluricultural y multilingüe podrían conjuntarse para irradiar ese orgullo de pertenecer a este país.
El ballet moderno y folclórico nacional, recientemente homenajeado, que a pesar de que el Estado no le garantiza el presupuesto, ofrece espectáculos extraordinarios cargados de historia, tradiciones, belleza, colorido y arte; las orquestas sinfónicas, incluyendo el Sistema Nacional de Orquestas, que con centavos mantienen una calidad extraordinaria de músicos; todo ese capital humano, bailarines, directores, coreógrafos y personal de apoyo, que con entrega hacen vibrar las almas de los espectadores. Y de valores y estrellas podemos también formar nuestro propio firmamento. Menciono solo a algunos pocos.
Nos iluminan de lejos: Tito Monterroso, Luis Cardoza y Aragón, Efraín Recinos, Carlos Mérida, Miguel Ángel Asturias, Manuel José Arce, Gloria Méndez Mina, José Milla y Vidaurre y Enrique Gómez Carrillo; y otros luceros a quienes todavía podemos ver, admirar y reconocer: María Teresa Martínez, actriz de estirpe, orgullo del Teatro Nacional; don Tonito García Urrea, escritor y periodista; Luis Domingo Valladares, polifacético y ser humano extraordinario.
Y de jóvenes talentos también está colmada nuestra esencia guatemalteca, genios visionarios como Luis von Ahn; voces privilegiadas como la del tenor Mario Chang y Gaby Moreno. La actriz Karen Martínez y el actor Brandon López, jóvenes estrellas de la pantalla grande; Domingo Yojcom, matemático; Elizabeth Zamora, experta en taekwondo; Sergio Flores, ingeniero, primer extranjero contratado en la planta Samsung en Korea; Luis Juárez Quixtán, guitarrista reconocido en Francia; Fabricio Díaz, fotógrafo reconocido por la National Geographic; Alfredo Leal Quej, ganador en la competencia de talento e innovación de las Américas; Ana Sofía Gómez, gimnasta; Mirna Ortiz y Érick Barrondo, marchistas; Carolina Barillas Mury, científica; Marcos Antil, q’njobal dueño de empresas en Estados Unidos, Colombia y México.
Gracias a ellos y a todos los grandes talentos y valores por esos actos que inspiran nuestras vidas.