Redacción Nacionales
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Una nueva investigación de El Faro señala que el actual director de Centros Penales, Osiris Luna Meza habría gastado $278 mil en “supervisores fantasmas”. De acuerdo a una investigación de la Fiscalía General de la República iniciada en 2020, diez supervisores cobraban salarios desproporcionados a cambio de entregar parte del dinero, al actual director, Osiris Luna.
Según menciona en la publicación, dos empleados de la Dirección General de Centros Penales declararon ante el Ministerio Público que ejercían plazas fantasmas durante más de un año, cobrando salarios muy altos con la condicionante que debían entregar una parte a Luna. Los salarios oscilaban entre los $1,526 y $3,333 mensuales por ejercer “supervisores regionales”, cargo que creó Luna durante los primeros meses de gestión. Esta investigación es una consigna del “Caso Catedral”, la cual fue cerrada con la destitución de Raúl Melara e imposición de un fiscal a fin al Gobierno de Bukele.
Aparte de las declaraciones de los dos empleados, la FGR descubrió que Osiris Luna contrato a ocho superiores regionales más que cobraron un total de $278,353, siendo inexistente la evidencia documental del supuesto trabajo que realizaron en los Centros Penales. El dinero para sostener a esas plazas, según documentos analizados por El Faro, habrían salido del presupuesto de las Tiendas Institucionales, esta, administra el dinero que depositan los familiares de los reos.
“Un exempleado, protegido con la clave “Luna”, dijo haber recibido 18 salarios y un aguinaldo que suman un total de $27,485.32; mientras que el otro exempleado, protegido con la clave “Sol”, aseguró haber cobrado diez salarios y un aguinaldo que suman $15,456.30”, detalló la investigación periodística de El Faro. Por su parte, la FGR calificó dichas plazas como “ficticias” o “fantasmas”
Es de aclarar que, en septiembre del año 2019, Bukele reformó el Reglamento General de la Ley Penitenciara para regular un nuevo mecanismo para el uso de los fondos de las Tiendas Institucionales eliminando así a ASOCAMBIO, que era un ente privado para manejar los fondos. La nueva disposición obligó a Centros Penales a crear una cuenta para un fondo único de Tiendas Institucionales, donde los familiares de los reos debían depositar $150 mensuales como máximo.
En agosto de 2020, la Revista Factum y el programa Focos revelaron detalles sobre cómo el director de Centros Penales habría gastado de manera indebida $8.5 millones, tras no remesarla a la cuenta del Ministerio de Hacienda, tal como la ley ordena. A raíz de esa publicación, los fiscales del extinto Grupo Especial Antimafia, investigó y apenas habían resuelto el destino del 3.1% de ese dinero. Luna gastó para contratar a los supervisores fantasmas, es decir, de esos $8.5 millones solo se conocen $278,353. Los involucrados en el caso no brindaron el derecho de respuesta al autor de la publicación.