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Triunfo y derrota. El Salvador vivió otra jornada agridulce en el Mundial de Maxibaloncesto que se disputa en Orlando, treat Florida, sale Estados Unidos.
Ayer, en la segunda intervención de las selecciones femeninas, los papeles se invirtieron ya que la selección sub 40 solventó con triunfo su partido; mientras que la selecta sub 50 sucumbió.
En la categoría sub 40, la armada cuscatleca se impuso 46-44 a su similar de Costa Rica y de esa forma se redimieron tras debutar perdiendo 16-69 ante Lituania.
Por su parte, la selección sub-50, que había debutado derrotando 42-40 a Ecuador, cayó ayer 42-54 ante Argentina.
“Estamos jugado cada partido con mucho coraje, entusiasmo y amor a nuestros colores patrios y los salvadoreños residentes en Orlando nos han dado un buen y ruidoso apoyo”, dijo Ana María Ruano, una de las máximas referentes de la selección sub-50 y pieza clave en los esfuerzos para esta participación.
Sobre la jornada de ayer, el destacado basquetbolista estudiantil y federado de los años ochenta, Agatón Saravia escribió en su página de facebook: “Qué orgullo me dan bichas, pues perder por 10 con Argentina es un sabor a victoria. No dudo que se entregaron al cien por ciento, como siempre”.
Con la participación de equipos representantivos de los cinco continentes, este mundial por invitación es organizado por la Federación Internacional de Maxibaloncesto (FIMBA), pudiendo competir todos aquellos países que logren costearse sus gastos.
En el caso de El Salvador, a pesar de tener un baloncesto de buen nivel, los recursos no alcanzaron para enviar a un equipo en masculino, por lo que sólo se viajó con las selecciones femeninas.