Luis Arnoldo Colato Hernández
Educador
La detención reciente de la alcaldesa soyapaneca, que recibiera una cobertura mediática masiva, no ha tenido ni tiene el propósito de sanear la cosa pública como se nos ha hecho creer.
Esto porque el personaje en cuestión no es el único en cometer tropelías del presente gobierno; de hecho, el saqueo de las arcas públicas ha sido tan descarado, que el ejecutivo incluso promovió la ley Alabí para impedir al soberano pedir cuentas del que claramente es un masivo robo implementado desde esta gestión, constituyéndose así en la peor cleptocracia de nuestra historia.
¿Qué decir, por ejemplo, de los $1000,000,000.00 que solo el año pasado se gestionaron a la banca multilateral, para obras que no se ejecutaron y sobre las cuales nadie da cuentas?
¿Qué podemos esperar de todas las mega obras que se ofrecen por algún tiempo para luego sencillamente dejar de mencionarlas, con el ánimo exprofeso de ser olvidadas?, el caso de surf y bitcoin city, o el tren del pacífico y todas las demás obras cuyos fondos fueron tramitados y desembolsados, pero no ejecutados.
¿Cómo explicar la serie de emprendimientos adelantados desde esta gestión, el caso bitcoin, por ejemplo, que claramente son un sonado fracaso?, ¿porque se los sigue impulsando sí constituyen una colosal pérdida para el país?
¿Qué hay de las masivas expropiaciones que se les hiciera a centenares de familias bajo el supuesto de que serían destinadas al desarrollo?, esas personas han quedado de brazos cruzados y sin futuro pues las soluciones que se les ofreció no se han cumplido al momento.
Tales expropiaciones recuerdan las realizadas por la dictadura Zaldívar, en el decenio de 1882 y que derivaron en los acontecimientos de 1932.
¿Y qué decir de los funcionarios del círculo presidencial, que se han enriquecido desmedidamente, a la vista de todos, y que son evadidos del escrutinio público al trasladarlos a otra función, sin ser escarmentados como aparentemente se ha hecho con la exedil soyapaneca?
Pongamos un craso ejemplo con el caso que nos ocupa desde el inicio: la exedil soyapaneca no actúo sola, siempre tuvo la compañía de la mayoría de su consejo, por lo que se les debió detener también.
Por otro lado, el caso es de particular interés por lo que misma exfuncionaria afirmó en una reciente entrevista: “me encuentro unida umbilicalmente a mi presi”, denotando crudamente su despersonificación y sometimiento al caudillo, así como ofreciendo pistas del porqué se la sacrifica.
Y ahora el anuncio del ejecutivo de promover al país como sede del concurso miss universo, como sucediera ya en los 70 ‘s.
Recordemos que entonces las tensiones con Honduras eran críticas, y no se brindó ayuda ni se asistió a los retornados, agravando la crisis interna que caldeaba los resentimientos de la población, amenazando la insurrección que llegaría con el magnicidio del Santo Romero, procurando con aquel concurso una distracción, como se pretende también ahora, con la enorme erogación de recursos necesarios para destinos de interés social, y que en cambio se usarán para esto: otro circo.
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