Oscar López
@OscarCoLatino
Miembros de la Secretaría Presidencial para Asuntos de Vulnerabilidad y la Dirección General de Protección Civil, con el apoyo de la Mesa Permanente para la Gestión de Riesgos, participaron en un acto para oficializar la implementación de la Política Nacional de Protección Civil, Prevención de Riesgos y Mitigación de Desastres.
Jorge Meléndez, secretario para Asuntos de Vulnerabilidad y director general de Protección Civil, explicó que la política fue aprobada en diciembre de 2017 por la Comisión Nacional de Protección Civil, Prevención y Mitigación de Desastres, y siguió el procedimiento que deben seguir los Acuerdos de Estado.
“Es ya una política legalmente constituida, ya que tenemos la respuesta oficial del gobierno de El Salvador y sobre su aprobación es que se está presentando. La política (de Prevención de Riesgos y Mitigación de Desastres), es un salto de gigante para El Salvador. Hace diez años teníamos un sistema nacional creado por ley, un plan nacional de protección civil actualizado en su componente de respuesta. Hoy, el mandato es que el país cumpla con el diseño de una política que se fundamenta en convenio internacionales regionales y compromisos nacionales”, explicó Meléndez.
Arístides Valencia, ministro de Gobernación y Desarrollo Territorial, aseguró que la política es: “un esfuerzo por desarrollar en el país una misión, un enfoque de gestión de riesgos integral”; pues se pasa de un enfoque fundamentado en la respuesta de las instituciones ante los desastres a uno que le apuesta crear capacidad, no solo de respuesta, sino también de prevención y de tener infraestructura capaz de mitigar el efecto de los mismos.
“Lo más importante que estamos logrando hoy, es colocar las bases para una visión prospectiva de los fenómenos, de los riesgos que pueden convertirse en desastre, eso significa la capacidad de adelantar posibles escenarios de riesgo provocados por la exacerbación de fenómenos naturales”, declaró el ministro.
La política, prevé la inclusión y participación de todos los sectores sociales y actores institucionales. Estableciendo cuatro ejes de acción que coinciden con las cuatro prioridades del Marco de Sendai, para que principalmente se fomente una cultura de prevención que incremente la resiliencia social, económica y estructural.
Los funcionarios coincidieron en que el país debe estar preparado para el impacto del cambio climático, por lo que se debe preparar, adaptar políticas y normativas de acuerdo al nuevo contexto de fenómenos ambientales que pueden afectar el territorio salvadoreño.