Ciudad de Panamá / AFP
El gobierno de Panamá declaró el miércoles como día de duelo nacional el 20 de diciembre, fecha en la que comenzó la cruenta invasión de Estados Unidos en 1989 para sacar del poder al exdictador Manuel Antonio Noriega.
De manera unánime, el gobierno panameño declaró «duelo nacional para el 20 de diciembre», anunció el presidente Laurentino Cortizo en conferencia de prensa.
«A 30 años de la invasión, por primera vez en la historia, el gobierno nacional reconoce declarar el 20 de diciembre día de duelo nacional para honrar a los panameños y todos los inocentes que perdieron su vida y defendieron la integridad de nuestro territorio», añadió Cortizo en Twitter.
La iniciativa, solicitada durante años por víctimas de la invasión, no implicará un día feriado. Sin embargo, las banderas del país permanecerán a media asta.
«Este es un reconocimiento que se le da a las víctimas y familiares. Como gobierno damos un primer paso en reconocer y valorar esta fecha», indicó la ministra de Trabajo, Doris Zapata.
El 20 de diciembre de 1989, más de 27.000 soldados estadounidenses invadieron Panamá para derrocar a Noriega (1983-1989), reclamado por un tribunal de Miami por cargos de narcotráfico.
Oficialmente el número de fallecidos en la invasión fue de 500, aunque algunas organizaciones de derechos humanos aseguran que murierom miles de personas.
Noriega se entregó a las tropas norteamericanas el 3 de enero de 1990 tras refugiarse en la Nunciatura. Hasta su muerte en 2017, estuvo preso en Estados Unidos, Francia y Panamá por narcotráfico, blanqueo de capitales y desaparición de opositores durante su régimen.
El año pasado la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) señaló a Estados Unidos como responsable por las «violaciones de derechos humanos» durante la invasión y pidió a Washington «reparar integralmente» a las víctimas.
Durante años los afectados por la intervención militar estadounidense han pedido a Washington que indemnice a Panamá y diga dónde están las fosas comunes.