Washington/AFP
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), sumida en una crisis financiera, había suspendido su periodo de sesiones pero Panamá ofreció financiar y acoger, a finales de año, la ronda de audiencias.
El presidente de la CIDH, comisionado James Cavallaro, agradeció en la nota a Panamá por un gesto de «valor incalculable» que representa una «demostración muy clara del compromiso» del país centroamericano con la defensa de los derechos humanos.
La contribución de Panamá para las sesiones, a realizarse del 29 de noviembre al 7 de diciembre en Ciudad de Panamá, principalmente abarca labores de logística como pasajes o el pago de intérpretes.
Adicionalmente, el país había otorgado 150.000 dólares a la CIDH para ayudar a enmendar su hoyo financiero.
La Comisión, ente autónomo de la Organización de Estados Americanos, sonó la alarma en mayo, al declarar que con un millón de dólares menos en sus arcas que el año pasado, debió suspender sus visitas a la región y las audiencias en las que organizaciones civiles y Estados ventilan la situación de derechos humanos en los 34 países miembros.
Los problemas financieros de la CIDH se originan en la caída de las donaciones: en los dos últimos años cayeron a casi la mitad.
Al mismo tiempo, el presupuesto regular -unos 5 millones de dólares- que recibe de la OEA, se mantuvo intacto y no hay señales de que eso vaya a cambiar: el ente regional está recortando 15% de sus fondos, en medio del estancamiento económico que afecta a la mayoría de sus países.
Los comisionados avergonzaron a los países durante un Consejo Permanente de la OEA a finales de mayo por el inestable esquema de financiamiento, y poco después, durante la 46ª Asamblea General del ente regional, hicieron una intensa campaña para atraer contribuciones de los países miembros.
«Es un esfuerzo muy importante el que hace hoy Panamá para hacer posible este período de sesiones, y así lo valoramos», expresó el nuevo secretario ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrão.
Otros países, entre ellos Argentina, Colombia y Uruguay, han ofrecido donaciones adicionales.
Mientras tanto, la CIDH y la Corte IDH, con sede en San José, crearon una comisión conjunta para explorar salidas a mediano y largo plazo a la crisis financiera.