Rosario Rivas
Redacción Diario Co Latino
Las coloridas “palancas” cargadas de frutas, el incienso, los bailes y los feligreses ataviados con sus tradicionales vestidos típicos son los elementos que diferencian la celebración del Día de la Cruz en Panchimalco.
La tradición se ha mantenido por años y años, porque cada 3 de mayo, se celebra la llegada del invierno y se agradece por los cultivos y las cosechas.
Y es el momento oportuno para que los lugareños agradezcan con flores, palmas, tamales, pito y tambor por un año de bendiciones y lo hacen cargando por la calles la Santa Cruz de Roma, hasta llegar a la iglesia.
Los jóvenes se unen a los ancianos, a las mujeres a los hombres para escuchar la misa.
La festividad, a parte de adorar la cruz y tomar u frutas, incluye también el pito y el tambor, los cohetes de vara, los historiantes y la bendición de la Santa Cruz.
Es de destacar que en Panchimalco hay cofradías para cada santo que se celebra, con sus respectivos mayodormos que son las personas encargadas de proveer de alimentos y bebidas en la festividad.
La celebración del Día de la Cruz es una tradición resultado de la fusión religiosa entre la celebración española de la Santa Cruz, que recuerda el hallazgo por Santa Elena, de la Cruz de Cristo, un 3 de mayo, y el tributo indígena a la madre tierra y el culto al dios Xipe Tótec. Con esta celebración se busca la bendición de Dios en los hogares y la tierra, para que siempre estén llenos de prosperidad.