Mirna Jiménez
@DiarioCoLatino
El director de la Policía Nacional Civil (PNC), Howard Cotto, manifestó ayerm que las pandillas siguen utilizando el accionar criminal y los homicidios como una estrategia para golpear políticamente a aquellas administraciones de gobierno, cuando esta no se doblega a sus intenciones e implementan una lucha frontal contra estos grupos criminales. También buscan presionar de esa forma para lograr beneficios.
Cotto se refirió en estos términos a la pandilla MS13, a la que se le atribuye el incremento de acciones criminales en los últimos días. “Hace ya tiempo que la MS ha tenido la actitud de instrumentalizar el crimen como presión para lograr sus fines”, señaló.
Previo a las elecciones presidenciales de febrero pasado, Cotto y también el ministro de Seguridad, Mauricio Ramírez Landaverde, habían solicitado a los candidatos a la presidencia pronunciarse públicamente en contra del accionar de las pandillas y en contra de cualquier acuerdo del Estado con esos grupos criminales, sin embargo, solo el aspirante por el FMLN, Hugo Martínez, atendió el llamado.
“El crimen organizado en el país percibe esta dinámica, va viendo que se está tratando de deslegitimar al gobierno en turno, esta dinámica de ataque político es percibida por el crimen organizado… me quedo con el hecho de que las pandillas perciben que es una coyuntura en la que ellos tienen que hacerse sentir como organización criminal”, recalcó el más alto funcionario de la PNC en entrevista con canal 12.
En la actualidad, El Salvador está viviendo una coyuntura con la transición de gobierno, ya que dentro de tres meses el empresario Nayib Bukele tomará posesión como nuevo presidente en sustitución de Salvador Sánchez Cerén, quien impulsó durante su gestión una política de lucha frontal contras las pandillas, que constituyó un cambio significativo respecto al primer gobierno del FMLN cuando el mandatario Mauricio Funes apoyó la tregua entre esos grupos.
De acuerdo con las estadísticas policiales, la cifra de homicidios en lo que va del año ha reducido en un 17% respecto al mismo período del año pasado. Hasta el 18 de febrero la cifra ascendía a 416 homicidios, mintras en el mismo período de 2018 ya había 500 asesinatos registrados.
“Si hay algo a lo que a las pandillas les afecta es la dinámica operativa investigativa de la PNC en conjunto con la Fiscalía General de la República”, manifestó.
Por otra parte, Cotto informó que hay avances en la investigación sobre la muerte de la familia del preparador físico del Sonsonate, Omar Pimentel. Informó que dos de los posibles responsables habrían sido ejecutados por la misma pandilla, según información de inteligencia recabada por la policía.