Ciudad de Panamá / AFP
El papa Francisco pidió este jueves desde Panamá mayor compromiso contra «cualquier forma de corrupción» en la política, una de las prácticas que más laceran a América Latina y que involucra a multinacionales y funcionarios.
El pontífice, que encabezará la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), señaló en su primer mensaje a los dirigentes que las «nuevas generaciones» les reclaman «transparencia» a sus líderes.
«Es una invitación a (…) llevar una vida que demuestre que el servicio público es sinónimo de honestidad y justicia, y antónimo de cualquier forma de corrupción», sostuvo el pontífice en presencia del mandatario anfitrión, Juan Carlos Varela, y diplomáticos.
Sus palabras evocaron uno de los principales problemas en una región sacudida por el megaescándalo de la red de sobornos que montó la multinacional brasileña Odebrecht para adjudicarse millonarios contratos públicos.
La compañía reconoció haber dado coimas por 778 millones de dólares entre 2011 y 2015 en Angola, Argentina, Brasil, Colombia, República Dominicana, Ecuador, Guatemala, México, Mozambique, Panamá, Perú y Venezuela.
También el país que recibe al papa fue epicentro en 2016 del llamado caso «Papeles de Panamá», tras la revelación de documentos que evidenciaban una gigantesca red de evasión de impuestos y corrupción en todo el mundo a través de sociedades opacas creadas por un bufete panameño.
Francisco insistió en que los jóvenes reclaman «un compromiso, en el que todos ―comenzando por quienes nos llamamos cristianos― tengamos la osadía de construir una política auténticamente humana».
«Desinformación» en internet
El papa Francisco hizo este jueves una advertencia contra la «desinformación» y la «distorsión consciente y selectiva de los hechos» en Internet, en un mensaje con motivo de la próxima Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales.
Internet «es una fuente de conocimiento y relaciones antes impensable», estima el papa argentino en su mensaje. No obstante, señala que «muchos expertos (…) también subrayan los riesgos que amenazan a la búsqueda y al intercambio de una información auténtica a escala global».
«Si bien Internet representa una oportunidad extraordinaria para acceder al conocimiento, también es verdad que se revela como uno de los sitios más expuestos a la desinformación y a la manipulación consciente y selectiva de hechos y relaciones interpersonales, que a menudo toman la forma del descrédito», afirma Francisco.
«Hay que reconocer que las redes sociales, si bien sirven para comunicarmos más por un lado, y para permitir encontrarnos y ayudarnos mutuamente, por otro, también se prestan para la manipulación de datos personales, con el objetivo de obtener ventajas políticas o económicas, sin el respeto debido a las personas y sus derechos», continúa el papa.
«Entre los más jóvenes, las estadísticas demuestran que uno sobre cuatro ha estado involucrado en casos de acoso cibernético», se lamenta Jorge Bergoglio.
El papa, que aboga frecuentemente por la acogida a los migrantes por y la diversidad como una riqueza para el género humano, también advierte sobre la web, en la que «con demasiada frecuencia la identidad se apoya en la oposición al prójimo, al extranjero, al grupo».