Yaneth Estrada
@caricheop
Este lunes, el centro de San Salvador amaneció con diversos promontorios de basura, luego de cuatro días de suspender el servicio (paro), debido a amenazas de privatización de parte de la alcaldía de San Salvador.
Según los representantes de ASTRAM, el alcalde Ernesto Muyshondt, del partido ARENA, ya tiene un acuerdo con ATESA de Occidente para prestar el servicio de recolección de desechos y barrido de calles desde abril próximo, lo que supone el despido de cientos de trabajadores.
“Si nosotros como clase trabajadora permitimos la privatización de los servicios de recolección y barrido de calles, los más afectados seríamos cerca de 1,500 trabajadores, porque la privatización lo que trae es despidos”, recalcó Alfredo Cartagena de ASTRAM.
Agregó que, por esta situación, han decidido suspender el servicio (paro) en algunas zonas de San Salvador, pidiendo al alcalde y al concejo municipal se solidaricen con más de 3,500 familias que resultarían afectadas por los despidos.
Privatización en marcha
Efectivamente, en documentos firmados por el alcalde y la vicepresidenta propietaria, Margarita Calderón Sol de Oñate, y con sello del Registro de Comercio se confirma que ETESA de Occidente será la encargada de prestar servicios públicos.
Asimismo, los sindicalistas denunciaron la falta de pago de la comuna capitalina para AFP, ISSS, prestamos personales e hipotecarios.
Habitantes de Santa Tecla también denunciaron las mismas acciones en este municipio, que ahora tiene el servicio de Teclaseo, el cual subió el costo de 7 a 12 dólares mensuales.