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Santiago Leiva
Diario Co Latino
Por más que el sol brille, click la tarde pinta gris para los burros del Pasaquina. El cuadro oriental se enfrenta está noche a un Alianza que les es inmisericorde y que le podría echar, de manera adelantada, una manita a sus vecinos marcianos.
En casa, el césped de Monumental estadio Cuscatlán, el cuadro paquidermo intentará volver a la senda del triunfo, escalar un par de peldaños en la tabla y continuar con su paternidad sobre el representativo de Pasaquina.
Y es que aparte de recorrer 188 kilómetros (dos horas y media) en bus desde Pasaquina hasta la capital, los pupilos de Juan Andrés Sarulyte se medirán hoy a un equipo que les tomó la medida desde el torneo anterior.
Es muy temprano para decir que existe una paternidad histórica, pero lo cierto es que en tres enfrentamientos ante los albos, la hinchada de Pasaquina no ha podido ni siquiera celebrar en casa.
En su primera visita a la capital, los burros cayeron 3-0 ante los paquidermos, en la grama del San Sebastián tampoco han podido mejorar sus números. En el partido de vuelta del Apertura 2014 empataron 2-2. Y en el juego más reciente los blancos retornaron de La Unión con un póker en sus maletas. Ganaron 0-4.
Las condiciones entre aquel enfrentamiento y este, sin embargo, son muy diferentes, porque mientras Alianza venía de un empate ante FAS, Pasaquina había caído en su visita a la “Juve” en San Juan Opico.
Ahora los albos vuelven a la acción después de caer ante FAS en el Óscar Quiteño, mientras que Pasaquina ha ganado sus dos últimas presentaciones en casa.
Un triunfo del cuadro oriental podría darle aspiraciones serias a luchar por uno de los boletos a las semifinales, pero más importante sacarle temporalmente siete puntos de ventaja al Atlético Marte en la lucha por el no descenso. Es de mencionar que los marcianos tendrán una dura visita a Metapán.
El partido Alianza- Pasquina corresponde a la onceava fecha del Clausura 2015 y se jugará de forma adelantada para no chocar con el clásico español Barcelona-Real Madrid. Se teme que el fútbol ibérico deje sin aficionados los estadios nacionales el domingo. De ahí que, los cuatro duelos restantes también fueron programados para el sábado.
