Alma Vilches
@AlmaCoLatino
“Condeno cualquier manifestación de violencia, particularmente en contra de personas en condición de vulnerabilidad”, así lo expresó el titular de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), Apolonio Tobar, ante un hecho de intolerancia por parte de un empleado de helados contra un adulto mayor.
El pasado miércoles fue difundido en medios de comunicación y redes sociales un video donde se aprecia al empleado de Helados Sarita atacando a golpes a un adulto mayo. El hecho ocurrió en la carretera hacia Quezaltepeque, La Libertad.
El procurador Tobar pidió a la Policía Nacional Civil (PNC) y Fiscalía General de la República (FGR) a investigar para que los hechos no queden impunes y puedan otorgarle a la víctima el procedimiento, la asistencia y protección necesaria, desde un enfoque diferenciado, conforme a los principios y derechos establecidos en la Ley Especial para la Protección de los Derechos de la Persona Adulta Mayor. “Reitero mi disposición de dar seguimiento al presente caso, ante las autoridades correspondientes e instó a la población salvadoreña a prevenir cualquier afectación a los derechos humanos rechazando todo tipo de violencia”, enfatizó el procurador.
Mientras tanto, el implicado en la agresión al adulto mayor fue capturado por la PNC e identificado como Omar Antonio Cruz Terezón, de 31 años de edad, quien en redes sociales difundió su versión de los hechos. El acusado publicó que el adulto mayor lo arrolló con el carro cuando se había orillado en la calle a preparar una publicidad brinda por la empresa.
“El señor se enojó porque le pegué en la ventana de su carro cuando me arrolló y se bajó a ultrajarme, cuando le reclamé que me pasó las llantas del carro en mis pies, sacó su bastón y me agredió.
Sé que actué mal, pero lo hice en defensa propia, no somos perfectos, pero lastimosamente cuando él me atropelló no lo sacan”, manifestó Terezón.
La PNC indicó que la captura fue posible gracias a la denuncia ciudadana de varios usuarios en redes, el implicado fue puesto de inmediato a la orden de la FGR para responder por sus acciones, será acusado de agredir a un adulto mayor, procesado por amenazas agravadas y lesiones graves, que tiene una pena máxima de 10 años de cárcel.
Se omitió el nombre de la víctima para preservar su seguridad, y no entorpecer la investigación, pero fue llevado a un centro hospitalario privado, informaron las autoridades.