Resumen Latinoamericano
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de República Popular China, Mao Ming, denunció las intenciones y la hipocresía de Estados Unidos hacia la isla caribeña, bloqueada hace más de 60 años.
China no permitirá a terceros calumniar las relaciones de su país con Cuba, aseguró en conferencia de prensa ofrecida en Beijing la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Mao Ming.
Sus declaraciones respondieron a una publicación del diario estadounidense Wall Street Journal, donde acusan a China de mantener estaciones de escucha en bases militares ubicadas en la isla caribeña.
Como destacó Mao, el viceministro de la cancillería cubana, Carlos Fernández de Cossío, negó el reporte periodístico, y aclaró que las supuestas bases chinas nunca han existido ni nadie puede dar fe de haberlas visto, ni siquiera la embajada de Estados Unidos en La Habana.
La Casa Blanca no cree en la amistad, la camaradería y la hermandad entre el gigante asiático y la mayor de las Antillas, una cooperación solemne y por encima de todo juicio, enfatizó la diplomática, quien además describió los vínculos como abiertos, directos y no dirigidos contra terceros, de acuerdo con un reporte de la agencia Prensa Latina.
Nunca serán aceptadas la calumnia y los informes maliciosos, insistió la vocera, y exigió al gobierno de Washington dejar de interferir en los asuntos internos de Cuba.
Del mismo modo, denunció el bloqueo económico comercial y financiero impuesto a la nación cubana por más de medio siglo, y recordó el estatus ilegal de la base militar norteamericana que ocupa gran parte de la bahía de Guantánamo, en el sureste de la isla, ya por más de un siglo.
También refirió el daño causado por la Casa Blanca al pueblo antillano al mantener al país en la lista de los llamados Estados patrocinadores del terrorismo.
“Arrojar lodo a otros no aliviará sus propios crímenes”, aseguró Mao, e instó al gobierno de Joe Biden a dejar de interferir en los asuntos internos de Cuba, retirarla de la espuria lista de terroristas y levantar el bloqueo y las sanciones económicas.
Por su parte, el ministro cubano de Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla, publicó en la plataforma X un enfático desmentido de las acusaciones del diario norteamericano y otras fuentes.
Al respecto, el titular resaltó la incongruencia de buscar estaciones chinas e ignorar las casi 800 bases norteamericanas en todo el mundo, incluida la de Guantánamo, “convertidas en centros de espionaje, torturas, injerencia e inestabilidad mundial”.
Las imágenes referidas por el diario citado son capturas desde el espacio de un sitio a 70 millas de Guantánamo donde, según expertos norteamericanos, están ubicados los intereses militares chinos.
A su vez, el presidente cubano, Miguel Díaz Bermúdez utilizó su perfil en esa red social para hacer burla del informe de Wall Street Journal, y tras crear la expectativa de una posible revelación, presentó una foto de bases chinas… en un terreno de beisbol de un estadio deportivo de la isla.