Por: Rolando Alvarenga
Cada vez que se conmemora un aniversario de las clasificaciones a los Campeonatos Mundiales de Fútbol de México 1970 y España 1982, sale a relucir la injusticia patriótica para con estos “héroes nacionales futbolísticos”. Injusticia deportiva porque desde aquellos años, cuando estaban en la cúspide de sus carreras y tras su glorioso retiro, la patria no les ha recompensado acorde a su gesta.
Por ello, en ocasión la celebración del 50º aniversario del debut y participación en el Mundial de México 70, nos parece una buena fecha para retomar el tema y hacer el llamado al INDES, a la Asamblea Legislativa y la FESFUT, para que gestionen y aprueben una justa pensión vitalicia para los sobrevivientes de tales hazañas.
La FESFUT, por su parte, debería tomar el acuerdo de que se les entregue un carnet vitalicio que les permita entrar gratis a los estadios del país, petición que en esta oportunidad tiene más sentido y mejores posibilidades, dado que este artículo (sobre estimular a los atletas que hayan dado gloria al país) está contemplado en la nueva Ley General de los Deportes.
Además, se cuenta con el hándicap de que el diputado y periodista deportivo, Raúl Beltrán Bonilla, de la Comisión de Juventud y Deporte, ha dicho públicamente estar dispuesto a rebuscarse por los 56 votos para su aprobación.
En la petición económica, como la entrada a los estadios, tienen mucho sentido humanitario, porque la mayoría de ellos, en sus últimos años de vida, siguen teniendo mucha necesidad económica.
Asimismo, hay mucha gente de las nuevas generaciones que le dará mucho gusto verlos en los estadios, antes de que viajen a integrar el seleccionado celestial.