Moscú/Prensa Latina
La empresa ucraniana Energoatom que opera la central nuclear de Zaporozhie anunció hoy haber desconectado de la red la unidad de potencia seis, la última que aún seguía funcionando.
Energoatom destacó este domingo en su canal de Telegram que una vez desconectado el bloque seis, se inició su refrescamiento y su transferencia a un estado “frío».
Según la compañía, el sexto reactor de la planta ha estado operando en modo isla durante los últimos tres días, cubriendo solo las necesidades de la propia central a un nivel de potencia críticamente bajo, de 114 a 140 MegaWatts.
La empresa Energoatom atribuye esta decisión a los daños que las líneas de conexión de la central con la red eléctrica del país eslavo han sufrido debido a los bombardeos ucranianos que rompieron los circuitos que proporcionaban la energía generada en la planta al sistema.
Por su parte, el jefe de la Administración Cívico-Militar de la región de Zaporozhie, Evgueni Balitski, declaró que las autoridades ya habían valorado la posibilidad de un cierre total de la central nuclear en medio de los bombardeos regulares de su territorio desde la parte ucraniana.
La central nuclear de Zaporozhie, que se ubica en la ciudad de Energodar, es la mayor instalación de ese tipo de Europa.
En marzo, las fuerzas rusas tomaron el control de esta planta.
El Ministerio de Defensa de Rusia asegura que las fuerzas de Ucrania lanzaron varios ataques contra la instalación con drones, artillería pesada y lanzacohetes múltiples en los últimos días.
Ante esta situación, es que se tomó la decisión de apagar la unidad de potencia número seis y transferirla al estado más seguro, de “parada en frío», destacó Energoatom.
Según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), una “parada en frío” significa que la temperatura en la vasija de presión del reactor se ha puesto por debajo de los 100 grados centígrados, y por tanto la liberación de materiales radioactivos está bajo control.