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Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
“El problema del plástico de un solo uso es mundial. Enferma a la población, a la biodiversidad y ecosistemas, estamos comiendo plásticos en nuestros alimentos, sin tener conciencia”, dijo María Victoria Chávez, de la Asociación Nayarit Mujeres y Juventudes y Ecofeministas de El Salvador.
Con la representación de un planeta atiborrado de plástico, en donde los océanos se han convertido en vertederos de desechos y plásticos, diversas organizaciones ambientalistas se pronunciaron por un “Día Verde”, en el contexto del “Viernes Negro” o “Black Friday”, fecha dedicada al consumo, y que celebran en el Norte de América, pero que ha sido incorporado al comercio nacional.
María Victoria afirmó que el daño a la salud de la población salvadoreña, por el uso constante de bolsas, pajillas, cubiertos, botellas y distintos depósitos de plástico, así como la afectación en los ecosistemas, porque el plástico no se transforma, ni destruye con el paso del tiempo.
“Nosotras como Mujeres Ecofeministas, como Nayarit, estamos haciendo un llamado a toda la población, para que se incorporen a esta lucha que está enfocada a salvar la vida de todas y todos, así como la biodiversidad, porque al desaparecer ellos, seguimos nosotros. La madre tierra tiene dificultades también para dar paso a los cultivos porque hay mucho plástico dentro y en la superficie, no puede respirar y estos daños son increíbles y puede ser irreversible”, acotó.
Las inquietantes cifras del “plástico de un solo uso”, dan cuenta que a nivel mundial se desechan alrededor de 10 millones de toneladas de residuos plásticos por minuto. Y que estos, al degradarse, se fragmentan formando minúsculas partículas que están en los océanos y absorbidos por la biodiversidad. “Cada persona consume alrededor de cinco gramos de plástico a la semana, aproximadamente, el peso de una tarjeta de crédito o un bolígrafo”, explicó Ingrid Hausinger, coordinadora del Eje de Plásticos de la Red Trinacional de Rescate del Río Lempa y la Fundación Heinrich Böll.
“Haremos una entrega a COMURES, de una ordenanza modelo para regular y prohibir los plásticos de un solo uso en el país. Los plásticos de un solo uso, muchas veces solo se emplean treinta minutos y luego se desechan, como pajillas, platos desechables, cubiertos y empaques. El plástico de un solo uso es el 40 % de la producción de plásticos en el mundo y en su gran mayoría, terminan en los ecosistemas y océanos”, señaló.
Sobre el contenido del modelo de ordenanza municipal para el plástico de un solo uso, que fue entregado a la Corporación de Municipalidades de El Salvador (COMURES), Hausinger declaró que se desarrolla en tres etapas de prohibición, luego de haber entrado en vigor la ordenanza. Con los primeros seis meses se prohíbe el uso de pajillas. Luego, a un año se pasa a la prohibición de las bolsas plásticas que entregan diversos centros comerciales. Y luego, al año y seis meses, se pasa a la etapa de prohibición de platos, tasas, vasos y cubiertos de plástico elaborados total o parcialmente de polietileno, polímeros de plástico no biodegradable, polipropileno y sus derivados.
“En toda Centroamérica, somos el único país que no está impulsando ordenanzas subnacionales de regulación o prohibición de plásticos de un solo uso. Guatemala tiene a veintidós municipios, que tienen ya este tipo de normativa de regulación y prohibición del plástico de un solo uso y, en Honduras, son veinte municipios y un ejemplo la isla Roatán, que ha logrado la prohibición de las botellas PET (envases de tereftalato de polietileno) y Costa Rica a nivel nacional. Y en El Salvador, este tema ni siquiera se está discutiendo. Como Red Trinacional para el Rescate del Río Lempa, demandamos que este tema se ponga en las agendas de trabajo de los gobiernos municipales”, argumentó Hausinger.
Sobre el plástico de un solo uso, señaló que estos van a parar al océano, donde se fragmentan y regresan a la cadena alimenticia, ante el consumo de peces y otras especies que han consumido microplásticos. En un año, expresó Hausinger, se puede haber ingerido 120 globos de cumpleaños, en gramos de plástico a nivel mundial.
“Esto viene en las botellas plásticas y el agua que tomamos, en los peces que comemos, en el aire que respiramos, en la cerveza y bebidas gaseosas. De las grandes empresas que más producen plástico es la Coca Cola la que produce este plástico de un solo uso. Esta empresa de manera individual produce 88 billones de botellas plásticas al año, que es suficiente para ir y volver a la luna 33 veces, si ponemos botella por botella. Y no es justo que las empresas que por ahorrar costos de logística y poner sus productos de manera más baratas en las tiendas y de manera más accesible -para ellos, no para nosotros-, sea responsabilidad nuestra deshacernos de ese producto”, reafirmó.
Luis González -activista de la UNES- señaló que la iniciativa de posesionar una ordenanza municipal modelo para prohibir el plástico de un solo uso era un “reto”, por los patrones de cultura adquiridos por los pueblos en Centroamérica, así como, la responsabilidad y voluntad política de los alcaldes y gobiernos municipales.
“Hay algunas municipalidades con las que nos hemos reunido, en Honduras y El Salvador, que están de acuerdo en impulsar esto; claro, esto tendrá que contar con un proceso de concienciación de la población, sobre la necesidad de dejar de utilizar este plástico, más que todo por el impacto ambiental y en la salud. Y todo comienza con la dieta del plástico que tenemos y comenzar a utilizar depósitos reutilizables y hacer las compras. La ordenanza modelo que presentaremos a COMURES es solamente el primer paso, que deberá ser -en algún momento- ampliado a una legislación nacional. Porque la realidad nos interpela a realizar cambios más fuertes, orientadas a la centralidad de El Salvador, porque si no lo hacemos, dentro de poco este será un país inviable”, puntualizó.
