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Redacción Nacionales
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A fin de garantizar la ejecución del Plan General de Seguridad Electoral y el mantenimiento del orden antes, durante y después las votaciones, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y la Policía Nacional Civil (PNC) establecieron un convenio de cooperación interinstitucional.
Asimismo, la PNC garantizará la seguridad de los observadores electorales, así como el transporte, distribución, recolección y almacenaje de los paquetes electorales.
Mediante este convenio el TSE, contará con el apoyo necesario para la seguridad y vigilancia en los centros de votación durante las pruebas y simulacros de los comicios, al igual que el día de las elecciones, para garantizar que el evento cívico no sea motivo de alterar el orden público.
La presidenta del TSE, Dora Esmeralda Martínez, expresó que en este nuevo proceso de elecciones la seguridad está garantizada, los ciudadanos podrán asistir tranquilamente a los centros de votación el próximo 4 de febrero y 3 de marzo de 2024, ya que el objetivo del Tribunal es una masiva participación en los comicios del próximo año.
“Es relevante la cooperación entre las diferentes instituciones del Estado, porque el objetivo trazado es hacer unas elecciones transparentes, democráticas, justas y darle a la ciudadanía los estándares de una elección donde no tenga problemas para acudir a votar”, recalcó.
El director de la PNC, Mauricio Arriaza Chicas, reiteró la disposición de cumplir con lo establecido en el artículo 86 de la Constitución, donde se establece la colaboración entre distintos órganos del Estado para el ejercicio de las funciones públicas.
“La Policía Nacional Civil estará antes durante y después de la fiesta cívica del 4 de febrero y el 3 de marzo, tenemos clara la misión de garantizar el orden, y la seguridad de toda la población salvadoreña”, dijo Arriza.
El convenio de cooperación interinstitucional con la PNC incluye identificar enlaces estratégicos en los países donde el TSE habilite centros de votación, para coordinar la seguridad con las autoridades locales, a fin de que la diáspora pueda acudir de forma tranquila a ejercer su derecho al voto el 4 de febrero de 2024.
