Catacamas/Signis ALC
Diez periodistas de la ciudad de Catacamas, click departamento de Olancho, Honduras, fueron agredidos físicamente e intimidados con las armas de dotación policial, durante la cobertura de una jornada nacional de movilizaciones, convocada por varios sectores estudiantiles, para rechazar las políticas gubernamentales que extienden la jornada educativa. Según una alerta Comité por la Libre de Expresión (C-Libre) llegado a la redacción de Signis ALC.L
os elementos de la policía que agredieron a los periodistas destruyeron también los equipos periodísticos de los comunicadores.
El reporte puntualiza que los uniformados José Santos Ramos Mejía y José David Zúniga Amador accionaron las palancas del cerrojo de sus fusiles en medio de los 10 periodistas y de los manifestantes.
El hecho más grave se registró contra el reportero, Raúl Amador, de Canal 30, porque fue intimidado por el policía Ramos Mejía que le quiso apuntar con su arma de reglamento y lo amenazó con disparar si no dejaba de grabar la protesta de más de 1,500 estudiantes del Instituto Técnico 18 de Noviembre, el principal colegio de educación secundaria en la ciudad.
Antes de eso, Ramos Mejía había agredido al periodista Amador, de Canal 30, al arrebatarle su cámara, estrellándola contra el suelo, mientras el corresponsal intentaba grabar imágenes de la toma.
El ataque a la prensa se registró en circunstancias en que los comunicadores realizaban la cobertura de las movilizaciones estudiantiles y los efectivos empezaron a amedrentar a la población estudiantil», indicaron los periodistas que cubrían la manifestación, dice la alerta de C-Libre.
Ante la arremetida policial, el periodista Gustavo Gallardo, de «Informativo La Verdad», que se transmite por el local Canal 11 y José Luis Maradiaga Paz, corresponsal de canal 33 y Radio Globo pidieron al policía Ramos Mejía que se calmara, sin embargo, este lanzó un manotazo destruyendo una segunda cámara.
Policías sin preparación
Enseguida Ramos Mejía intentó apuntarle con su pistola al periodista de Canal 11 pero, «afortunadamente en medio del tumulto la pistola se cayó y fue recogida por un estudiante que se la entregó en sus manos», indicó Gallardo en declaraciones al Comité por la Libre Expresión (C-Libre).
Los 10 comunicadores de radio y televisión afectados, acompañados por el presidente de la Red de Alertas y Protección a Periodistas (RAPCOS) en Olancho, Rolando Iscoa, denunciaron ante el Ministerio Público y responsabilizaron «al gobierno, al ministro de Educación, Marlon Escoto, y a la Policía Nacional, por cualquier cosa que le pase a alguno de los afectados».
En reacción al ataque, los pobladores de Catacamas se pronunciaron «en diferentes espacios informativos donde se ha abierto los teléfonos y han repudiado esta acción de la Policía, pues, se trata del primer incidente de este tipo en la ciudad», agregó Iscoa.
El presidente de RAPCOS también detalló que tras interponer la denuncia, el coordinador de fiscales del Ministerio Público en Catacamas aseguró que realizarían las investigaciones pertinentes.
Al respecto, el portavoz de la Policía Nacional, subcomisionado Leonel Sauceda, indicó que están en un proceso de investigación para precisar si los policías denunciados fueron los que participaron en este hecho y se les someterá a una audiencia de descargo. De encontrar que violentaron la ley, se les aplicarán las sanciones correspondientes, indicó.
Los jefes departamentales tienen instrucciones de respetar, servir, ayudar y ver como un amigo al periodista, sostuvo el oficial.