Rosmeri Alfaro
@DiarioCoLatino
“Las medidas de contención del COVID-19 están poniendo en riesgo la continuidad de los empleos e ingresos de muchas personas”, así lo aseguró la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES), la cual consideró preciso mitigar el impacto de la emergencia sanitaria. De acuerdo con la institución, es pertinente diseñar mecanismos focalizados de asistencia a hogares vulnerables. “El reto es implementar políticas estratégicas que atiendan los problemas a corto plazo para que pueda subsistir más allá del impacto de la pandemia misma”, manifestó la Fundación, la cual consideró que, de no manejarse adecuadamente, puede convertirse en una crisis económica prolongada.
Para FUSADES, todas las decisiones de política pública deben apegarse al principio de sostenibilidad. “La urgencia no es la mejor aliada para tomar decisiones (…). La drástica medida de una emisión de $2 mil millones constituye una restricción futura a los empleos, el crecimiento y el bienestar de los salvadoreños”, expuso.
Aseguró que, “en cuestión de tres años, en 2022, la deuda pública superaría el 100 % del Producto Interno Bruto (PIB), un aumento de más de 30 puntos, y para lograr la sostenibilidad se necesitaría un ajuste fiscal de más del 8 % del mismo”.
Respecto a las medidas para romper la cadena de transmisión del virus, señalan que aunque es vital contar con suficientes camas para cuidados intensivos y de hospitalización para quienes pudieran necesitarlas, la aplicación de pruebas masivas para detectar y aislar a quienes hayan sido contagiados podría ser más efectiva y menos costosa.
En relación con la atención de personas en Centros de Cumplimiento de Cuarentena, afirmó que el reto es asegurar que las instalaciones en donde se encuentran y los servicios que reciben son óptimos. “Se estima que, al 21 de marzo, ya habían cerca de 2,395 personas en 47 centros que operan en diferentes condiciones”.