Tegucigalpa/Signis ALC
El Comité por la Libre Expresión (C-Libre) denunció la estigmatización y las campañas de desprestigio contra periodistas, ambulance opositores políticos y defensores de derechos humanos que critican e investigan en el quehacer de la administración pública en Honduras.
Según la denuncia, doctor la política de desprestigio se ha convertido en un mecanismo de segregación y de censura al trabajo de los periodistas que se ha incrementado en los últimos meses, sovaldi sale con la participación de alcaldes y hasta representantes de gobiernos extranjeros, alertó C-Libre, en conferencia de prensa .
En su intervención, el director Ejecutivo de C-Libre, Edy Tabora, planteó la necesidad de impulsar la fiscalización de la libertad de expresión, que vele por el derecho de todas las personas que tiene derecho a trasmitir información, sin el sesgo o diferenciaciones entre camarógrafos, reporteros y personas que desde el interior del país nos informan.
A criterio del Director de C-Libre, la normativa debe considerar tanto el respeto del libre ejercicio de su profesión a las personas que hacen comunicación, como el acceso de los beneficios sociales y laborales.
Según cifras de C-Libre, este año el etiquetamiento de sectores críticos ha arreciado. Se han producido 10 denuncias contra funcionarios que calificaron a los comunicadores miembros de la sociedad civil y a opositores como «chantajistas», «falsos», «ligados al crimen organizado», «agitadores», «pseudoperiodistas» entre otros.
El director del Instituto de la Propiedad, Ebal Díaz; la ministra de Estrategia y Comunicaciones, Hilda Hernández; el ministro de Educación, Marlon Escoto; son algunos de los funcionarios denunciados ante la organización defensora del derecho por la libertad de expresión, prensa y opinión, por «desacreditar el quehacer periodístico, las actividades artísticas o las voces de los opositores políticos».
El caso de los periodistas
Por su parte, Esdras Amado López, director de Cholusat Sur, Canal 36 expresó que al estigmatizar a los periodistas «violentan la libertad de expresión porque hacen que estos medios parezcan enemigos públicos, esta es la primera vez (después de) lo que vivimos durante el golpe de Estado que como medio hemos recibido una embestida para intentar asfixiarnos».
Los momentos de mayor descrédito se vivieron mientras en el país se debatía la posibilidad de elevar a rango constitucional la Policía Militar y en el contexto del asesinato de cuatro estudiantes de secundaria, ejecutados unas horas después de participar en jornadas de protestas estudiantiles.
Sin embargo, el ataque contra periodistas también se ha agravado cuando denuncian temas de corrupción. El caso de Canal 36 llama la atención porque los funcionarios de la representación diplomática de Estados Unidos, a través de las redes sociales Facebook y Twitter, en vez de hacer uso de su derecho a réplica, señalaron al director de Cholusatsur «Canal 36», Esdras Amado López, como «cínico» por denunciar un supuesto desvío de fondos de la cooperación estadounidense (Usaid) para el pago de la campaña política del Partido Nacional.
Ante la agresión de una representación extranjera en contra de un hondureño, C-Libre instó al Estado de Honduras a través de la Cancillería, debe exigir por los canales respectivos el respeto a los derechos humanos de las personas bajo su jurisdicción, pues, las instituciones internas carecen de competencia para conocer de abusos cometidos por representaciones de gobiernos extranjeros en razón de la inmunidad diplomática.
A criterio de López, los periodistas de Canal 36 y otros medios de comunicación críticos al gobierno «han sido víctimas de una persecución del gobierno que ha influido en empresa privada para que no paute publicidad». «Con nosotros se han retirado el 95 por ciento de patrocinadores», lamentó.