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La iglesia católica salvadoreña celebró la Santa Misa en agradecimiento por los tres años de Pontificado del Papa Francisco en Catedral Metropolitana.
El encargado de la homilía de la santa misa fue monseñor William Iraheta, treat obispo de Santiago de María, quien hizo un reiterado llamado a la unidad. “Solo superando nuestras diferencias podemos lograr el desarrollo del país”, dijo.
También, hablo del ministerio petrino entregado por Jesús al apóstol Pedro y delegado por gracia del Espíritu Santo hasta el Papa Francisco, quien lo ha ejercido bajo la dirección de Dios con su propio carácter y diligencia.
“El Papa es la voz de la voluntad del señor y en eso radica el Ministerio Petrino, principio de la iglesia y firmante perfecto de la unidad”, añadió.
A la misa asistió el presidente de la República, Salvador Sánchez Cerén y su esposa Margarita de Sánchez. Además, del Canciller Hugo Martínez; el Secretario de Gobernabilidad, Hato Hasbún; el secretario privado de la presidencia Manuel Melgar y el Presidente de la Corte Suprema de Justicia Oscar Pineda.
Sánchez Cerén participa en aniversario de Romero
El presidente Salvador Sánchez Cerén y la primera dama Margarita Villalta de Sánchez asistieron a la misa conmemorativa por el 36 aniversario del martirio del Beato Oscar Arnulfo Romero en Catedral Metropolitana.
La misa fue oficiada por el reverendo Oscar Julio Vian Morales, arzobispo de Guatemala, quien en su homilía destacó el legado de fe, amor y esperanza dejado por el beato salvadoreño a su pueblo.
“El beato Romero se identificó con la misión de Jesús y corrió la misma suerte, estemos alegres porque su vida fue fiel reflejo de la vida de Cristo, verdaderamente amó a pequeños y pobres, se identificó con los preferidos de Dios, insertándose en su dolor, los ayudó, fue un ejemplo de padre”, agregó.
“Hermanos, monseñor Romero fue y sigue siendo una gran inspiración para ustedes, no fue beatificado solo por la forma que murió, sino sobre todo por su manera de vivir el evangelio, por su entrega generosa, coherencia de vida, imitemos su modo de vivir tan unido a Cristo y a los pobres, de manera que seamos profetas para liberar a este pueblo”, manifestó el obispo guatemalteco.
El secretario de Comunicaciones, Eugenio Chicas, aseguró que para el gobierno del presidente Sánchez Cerén la conmemoración del XXXVI aniversario es un acto de gran trascendencia, ya que “nos llama a la unidad nacional, a la sensibilidad por la vida humana”.
“Nos congratulamos en la representación que hemos tenido por medio del presidente de la república, quien se apersonó a esta actividad, que es la conmemoración del 36 aniversario del martirio de monseñor Romero, esto es una gesta que no solo nos recuerda el martirio de monseñor, sino también nos trae un mensaje de paz y de unidad a la sociedad,” aseguró el portavoz gubernamental.
El martirio del beato Óscar Arnulfo Romero se ha convertido en una bandera de lucha y esperanza para la consecución de una sociedad más justa y equitativa.
Su beatificación reunió a miles de salvadoreños y salvadoreñas, así como a reconocidas figuras internacionales que comparten el ideal de romper el paradigma de una sociedad históricamente marcada por la injusticia y desigualdad.
En este sentido, el presidente Salvador Sánchez Cerén ha reiterado que la vida y obra del Beato Romero, constituye una luz que ilumina el camino que dirige el trabajo de su gobierno para lograr un país próspero, educado y seguro. En sus mensajes a la nación, el jefe de Estado ha manifestado que “esa fuerza de monseñor Romero está en nosotros, está en nuestro pueblo”, e invita a la sociedad a que basándose en el ejemplo del beato salvadoreño “no nos dobleguemos ante el temor sino que construyamos la vida”.