TeleSUR
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, destacó la influencia de las redes sociales en la salud mental y los procesos políticos, y abogó por una regulación global de la inteligencia artificial para limitar sus efectos nocivos.
Durante una entrevista con Ignacio Ramonet, el presidente Nicolás Maduro analizó el impacto de las redes sociales en la sociedad y el poder de las empresas privadas detrás de estas plataformas.
Maduro enfatizó que estas compañías poseen «un inmenso poder de comunicación, que nunca antes nadie había tenido en la historia de la humanidad», lo que les permite influir profundamente en la mente de millones de personas, no solo por razones comerciales, sino también con fines políticos.
El mandatario venezolano destacó cómo las redes sociales han sido utilizadas para «la manipulación de procesos electorales, de procesos políticos y la desestabilización de países», mencionando que naciones como China, India y Rusia ya ejercen cierto control sobre estas plataformas.
En particular, señaló los desafíos que plantea TikTok. Según Maduro, esta plataforma ha sido un vehículo para la promoción de la violencia y los retos virales peligrosos, mencionando casos recientes en Venezuela: «Por uno de los retos virales de TikTok hubo el fallecimiento de dos niños, una niña y un niño. Otra persona fue quemada, con el 70% de su cuerpo destruido, cumpliendo en vivo un reto viral».
Ante estos hechos, el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela emitió una sentencia que obliga a TikTok a abrir una oficina en el país, pagar una multa de 10 millones de dólares y someterse a la legislación venezolana. Maduro advirtió que, de no cumplirse estas medidas, se tomarán acciones más severas: «Estamos obligados a proteger la salud mental de nuestros niños, niñas y jóvenes».
El presidente también criticó la censura selectiva de TikTok, afirmando que durante eventos de violencia en Venezuela, «de cada 10 videos que llegaban, 8 promocionaban la violencia en las calles».
Inteligencia artificial: entre avances y amenazas
En otro apartado de la conversación, Ignacio Ramonet introdujo el tema de la inteligencia artificial (IA) y sus implicaciones éticas. Maduro coincidió en la necesidad de un marco internacional para regular esta tecnología, destacando tanto sus beneficios como los riesgos que implica.
«La inteligencia artificial, sin lugar a dudas, es un avance tecnológico que sorprende a la humanidad», dijo, mencionando que las principales fuentes de IA se encuentran en Estados Unidos, China y Europa.
Sin embargo, Maduro advirtió sobre los efectos nocivos que esta tecnología puede tener si no se regula adecuadamente.
Citando a científicos que han alertado sobre el tema, subrayó la importancia de limitar los peligros sin frenar la innovación: «Hay que encontrar un equilibrio que permita avanzar en la reflexión tecnológica y científica, pero que también proteja a las sociedades de las amenazas que representa».
Finalmente, el presidente llamó a la acción conjunta de los países para enfrentar estos desafíos globales. «Es imprescindible que las naciones del mundo trabajen juntas para definir las reglas del juego en este terreno tan complejo», concluyó