Por: Rolando Alvarenga
Así como le dio más protagonismo al INDES, el presidente de la República, Nayib Bukele, debe introducir algunos puntos a la Ley de los Deportes como: acceso gratuito a la práctica deportiva en general; prohibir que se siga alquilando los escenarios deportivos para actividades extradeportivas y otorgar el estatus de misión oficial con viáticos a las delegaciones deportivas que viajen al extranjero.
En cuanto al acceso a la práctica deportiva, dicho aspecto debe ser gratuito por el beneficio de las mayorías.
Y, a pesar de que el pueblo no tenga dinero para hacer deporte, se empuja así a la niñez y a la juventud a no buscar refugio en otro tipo de distracciones antisociales.
La petición puede ser posible a partir de la anunciada mejora en el presupuesto deportivo estatal para este año.
Luego, a través de los años y sin recibir directamente los beneficios económicos del alquiler de los escenarios deportivos, el deporte en términos generales ha venido sufriendo el desplazamiento de sus santuarios por eventos extradeportivos.
El estadio nacional “Jorge Mágico González” ha sido un ejemplo de este punto que para nadie es desconocido.
Por tanto, se presenta una buena oportunidad para que con la Ley quede inmunizado de este abuso en el deporte cuscatleco.
Finalmente, de acuerdo al criterio popular: “un atleta vale más que un político por la gloria que le da a El Salvador cuando se corona en la alta competencia”; no recuerdo que alguna vez algún político haya sido recibido con bombos y platillos en el aeropuerto y lo hayan traído en hombros a la capital.
Por ello, se agradecería que en la nueva Ley de los Deportes se le dé el estatus de misión oficial a todo contingente que viaje al extranjero y con sus respectivos viáticos. De lo contrario, estaremos hablando de una Ley sin sustancia.