Redacción Nacionales
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La unidad de comunicaciones de Centros Judiciales destaca este jueves que mantendrán la detención en contra de William Garrido, luego de que este ofreciera a sus víctimas ranchos de playa que no existían.
En diciembre de 2021, Walter Aguilar Garrido ofreció a la víctima un rancho de playa en la Costa del Sol. Para lograr la reservación se debía depositar $150. La víctima hizo el depósito y se trasladó con su familia al lugar llamado “Sol y Mar”, que resultó ser inexistente.
Al exigir la devolución del dinero, la víctima recibió amenazas de muerte de Aguilar Garrido. Este fue detenido en noviembre de 2022 por estafa y amenazas con agravación especial.
La audiencia preliminar se desarrolló en el Juzgado Primero de Instrucción de Santa Tecla, en la cual se ofertó la prueba y se determinó que el proceso pase a la etapa de Sentencia.
Además, se reveló que Aguilar Garrido enfrenta más denuncias por hechos similares. Su detención responde a un patrón de estafa y amenazas, evidenciando un modus operandi delictivo recurrente.
Pandilleros son condenado a 10 años
En otro caso judicial, dos pandilleros recibieron una pena de prisión de 10 años cada uno por el delito de extorsión agravada en contra de una víctima a quien le exigían $200 por dejarla vivir.
El 29 de abril de 2022, dos pandilleros de la 18 llegaron al negocio de la víctima, y le exigieron 200 dólares mensuales como “renta” o amenazaban con atentar contra su vida. Uno de ellos fue identificado como Miguel Ángel Menjívar Rivas, alias “Miguelito”, colaborador de la pandilla 18 Revolucionarios, tribu Zacamil.
Ante la falta inmediata de los 200 dólares, la víctima acordó pagar 50 dólares semanales a los pandilleros. El 3 de mayo, Diego Ernesto Mendoza López, también colaborador de la 18-R, enviado por “Miguelito”, llegó a la casa de la víctima para recoger el dinero.
El 4 de mayo de 2022, la víctima denunció a los dos sujetos. Las autoridades iniciaron una investigación en su contra mientras permanecían detenidos bajo el régimen de excepción por delitos de agrupaciones ilícitas.
Por estos hechos el Tribunal 4° de Sentencia de San Salvador condenó a 10 años de prisión a ambos pandilleros y al pago de 50 dólares en concepto de responsabilidad civil en perjuicio de la víctima.