Por María Elena Bucheli/Gersende Rambourg
París/AFP
Un hombre armado con un machete atacó este viernes a militares al grito de «Allahu Akbar» en la turística galería comercial del museo del Louvre de París, antes de resultar gravemente herido de bala por uno de ellos.
«Visiblemente» se trata de un «ataque terrorista», declaró el primer ministro francés, Bernard Cazeneuve.
Hacia las 10H00 de la mañana (09H00 GMT), un hombre «se abalanzó sobre cuatro militares» uniformados que patrullaban la zona, profiriendo amenazas y gritando «Allahu Akbar» (Dios es el más grande), indicó el jefe de la policía de París, Michel Cadot.
Al no lograr neutralizarlo, uno de los militares disparó «cinco balas», hiriendo gravemente en el vientre al agresor. Uno de los uniformados resultó herido levemente en la cabeza.
El atacante está hospitalizado en estado crítico, señaló una fuente cercana a la investigación.
El agresor «llevaba al menos un machete y quizás otra arma» así como «dos mochilas», que «no contenían explosivos», agregó el prefecto.
Un segundo hombre con un «comportamiento sospechoso» fue detenido, dijo Cadot, sin dar detalles.
Desde Malta, donde asiste a una cumbre de la Unión Europea, el presidente François Hollande calificó el ataque de «agresión salvaje» y elogió «la valentía» de los soldados.
La fiscalía antiterrorista de París abrió una investigación.
Turistas evacuados
El incidente se produjo en el Carrusel del Louvre, una galería subterránea con numerosas tiendas y restaurantes abierta al público en general y por la que también se puede acceder al museo.
Las alrededor de 250 personas que se encontraban en ese momento dentro del museo permanecieron confinadas en un lugar seguro hasta el mediodía, cuando empezaron a ser evacuadas «en pequeños grupos».
Algunos testigos describieron escenas de pánico. «Estaba en las escaleras cuando escuché disparos. Fue muy extraño, nadie sabía qué hacer, vi a gente corriendo, cundió el pánico», contó Svetlana, una empleada de la galería que no quiso dar su apellido.
«Vimos a los clientes en la sala corriendo y enseguida supimos que pasaba algo grave. Salimos, temimos por nuestras vidas», dijo a la AFP una empleada de un restaurante del Louvre que pidió no ser identificada.
La policía acordonó la zona ubicada en pleno centro de la capital.
El Louvre es uno de los museos más frecuentados del mundo aunque el número de visitantes cayó un 20% en los dos últimos años.
Alerta máxima
Francia se encuentra en estado de alerta máxima tras una ola de atentados yihadistas que dejó 238 muertos y centenares de heridos desde el 7 de enero de 2015.
Militares uniformados patrullan cada día las calles de la capital francesa y sus principales atracciones turísticas.
En enero de 2015, los hermanos Said y Cherif Kouachi penetraron en la sede del semanario satírico Charlie Hebdo y ejecutaron a 11 personas, entre ellas varios de sus destacados dibujantes.
Diez meses más tarde, un comando yihadista que juró lealtad al grupo Estado Islámico (EI) atacó bares, restaurantes, una sala de conciertos y el estadio nacional en París la noche del 13 de noviembre de 2015, matando a 130 personas.
En julio pasado, un extremista tunecino arrolló con un camión a la multitud que asistía a los fuegos artificiales con motivo de la fiesta nacional del 14 de julio en Niza, en la Costa Azul, matando a 86 personas.
Unos días después, un cura católico fue degollado por dos yihadistas en una iglesia del norte de Francia.
El grupo Estado Islámico, que pierde terreno en Irak y Siria donde autoproclamó un califato en 2014, amenaza continuamente a Francia por su participación en la coalición militar internacional antiyihadista en esos dos países.