Budapest/PL
El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, afirmó que la religión islámica de los inmigrantes significa un peligro para Europa y llamó a defender la cultura cristiana del continente.
Durante su primer mitin de precampaña para las elecciones parlamentarias del próximo ocho de abril, Orbán aseguró que ‘la última esperanza de Europa es el cristianismo’.
El jefe del Gobierno húngaro se refirió a un avance del islam en los países occidentales del continente por el aumento del número personas que practican esta religión.
Orbán prometió la aplicación de armas legales ante esta situación y adelantó que entregará a la presidencia búlgara de la Unión Europea un proyecto de ley para ‘resolver la defensa de las fronteras europeas’.
Mientras, centenares de personas protestaron este domingo contra el primer ministro en las afueras del Bazar de los Jardines del Castillo, donde Orbán estaba reunido con sus simpatizantes.
Por su parte, el Parlamento húngaro prevé el debate de una serie de proyectos legislativos en el país para controlar el funcionamiento de Organizaciones No Gubernamentales que apoyan la inmigración.
A principios de este año, en una entrevista concedida al periódico alemán Bild, Orbán calificó a los refugiados como ‘invasores musulmanes’, en referencia a la negativa de su país de recibir a los solicitantes de asilo.
Las elecciones generales en Hungría están programadas para el próximo ocho de abril y según los sondeos se prevé la victoria del actual jefe de Gobierno Viktor Orbán.