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A 733.1 millones de dólares ascendieron las entradas brutas de Inversión Extranjera Directa (IED) a El Salvador durante los primeros seis meses de 2017, $190.7 millones más respecto a lo registrado durante el mismo semestre del año anterior. Este es el mayor aumento de IED en los primeros semestres desde el año 2010, informó el Banco Central de Reserva (BCR).
Los flujos de IED que ingresaron a El Salvador fueron liderados por Panamá con $111.3 millones, utilizados en su mayoría en el sector financiero. Le sigue Luxemburgo con $90.3 millones en inversiones relacionadas con el crecimiento externo, y Reino Unido con un monto de $65.4 millones asociados al sector industrial, particularmente en las actividades de fabricación de productos electrónicos.
Según la institución para la variación (35.2%) fue determinante el impulso generado por el sector industrial, el cual captó el 41.5% de esas entradas, con un monto de $304.4 millones.
“El sector de electricidad recibió $161.9 millones en IED, equivalentes al 22.1% del total. Por su parte, las salidas brutas de IED acumularon un monto de US$320.1 millones, lo que se traduce en una disminución del 18.8% respecto al año anterior”, indicó el BCR.
El flujo neto de inversión extranjera en la economía salvadoreña a junio de 2017 también presentó un incremento al pasar de $148.2 millones en el primer semestre de 2016 a $413 millones en el mismo período de este año, un aumento de más del 100%, según el BCR el valor más alto observado desde 2010.
“La reinversión de beneficios de las empresas, el financiamiento a partir de instrumentos de deuda entre empresas relacionadas y las inversiones generadas en nuevos proyectos eléctricos fueron claves en este desempeño”, detalló el Banco Central de Reserva.
Agregó que la industria manufacturera se convirtió en el sector con mayor IED en el primer semestre del año con $225.2 millones, gracias a su continuo fortalecimiento y especialización en actividades textiles y de confección, fabricación de cemento, maquilado de componentes electrónicos, entre otras. Las inversiones orientadas a la transformación de la matriz energética salvadoreña también influyeron en estos resultados, al totalizar un flujo neto de $84.3 millones.
