Tomado de Carta Económica
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El pueblo y Estado salvadoreño está sufriendo las consecuencias de la imposición del sistema privado de pensiones, doctor mientras las AFP y Aseguradoras obtienen cuantiosas ganancias. Para que sea parte de la discusión de este tema le invitamos a que comente el presente artículo en www.cartaeconomica.com.
Iniciaremos indicando que la razón fundamental de privatizar los sistemas de pensiones fue para otorgarle a los grupos financieros extranjeros (Bancos, thumb Empresas de Seguros, Administradoras de Fondos de Pensiones, Emisores de Tarjetas de Crédito, etc.) la oportunidad de ganar jugosas utilidades mediante el manejo de las cotizaciones de los trabajadores y el pago de comisiones por administrarles su dinero, actualmente son dos conglomerados financieros extranjeros los que administran los fondos de pensiones, City Bank y Banco Agrícola (Bancolombia).
La magnitud de beneficios que vaticinaban los defensores del sistema privado era tan importante, que no estaban dispuestos a dejar pasar la oportunidad, como se demuestra a continuación con datos a partir del año 2000 hasta el año 2014.
1. Utilidades de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP)
Del año 2000 al 2014, las AFP obtuvieron utilidades por un valor de más de US$252 Doscientos Cincuenta y Dos Millones de Dólares, como se presentan en la gráfica a continuación:
El monto de las utilidades obtenidas en el período 2000/2014 les permitió a las AFP recuperar el capital social invertido 8.8 veces, lo cual equivale a una rentabilidad anual promedio de 59%; indicadores que no se repiten en ninguna otra actividad económica.
2. La comisión por administración
La comisión que cobran las AFP a los cotizantes es por el servicio de administrar las cotizaciones, según el artículo 48 de la Ley del Sistema de Ahorro para Pensiones, por un lapso que incorpora los años de cotización del trabajador, más el tiempo que dure la pensión cuando ya está jubilado el cotizante. Siendo esto así, el regulador debió haber establecido políticas contables que no permitieran a las administradoras de las pensiones llevar a ingresos cada año todo lo recibido en concepto de comisiones.
Según datos de la Superintendencia del Sistema Financiero, entre el año 2000 y 2014, las AFP han recibido comisiones por administración de las cotizaciones por un monto de US$1,358,314,777.16 y de ese valor han utilizado para el pago de primas de seguro previsional la suma de US$601,459,969.99; por tanto, se han quedado con ingresos netos de US$758,854,807.77 (Setecientos millones ochocientos cincuenta y cuatro mil ochocientos siete con 77 centavos).
La porción de las comisiones que pagan los cotizantes, no devengada por las AFP, debería acreditarse al Fondo de Pensiones, para que esos recursos generen ingresos a su favor.
En realidad, es preocupante que no se use el concepto de lo devengado para que las AFP presenten sus estados financieros, sino el concepto de lo percibido, lo cual es contrario a los estándares contables de reconocimiento internacional, porque esto les ha permitido que se apropien de ingresos que no les corresponden y así incrementar sus utilidades, las cuales, por ser empresas extranjeras, sacan del país.
Peor sería si esto se ha concertado con las autoridades supervisoras (Superintendencia del Sistema Financiero), previendo una eventual disminución de las utilidades y programar la retirada del país de estas empresas, por lo que dejarían al Estado la administración de las cuentas individuales de los cotizantes, sin los recursos designados por la ley para cubrir los costos de administración de las pensiones.
Con un ejemplo muy sencillo se demuestra que las AFP no debieron haber contabilizado como ingreso el valor no devengado de esas cotizaciones. El ejemplo supone lo siguiente:
a)Una persona se afilió al sistema de ahorro para pensiones en el mes de abril de 1998, cuando tenía 25 años de edad y que esta persona trabajará y cotizará de forma permanente 24 años, para alcanzar la edad de jubilación;
b)Que esta persona decidirá pensionarse a los 60 años y que al otorgarle la pensión le estiman que vivirá otros 15 años más, por consiguiente, la Administradora de Fondos de Pensiones tendría que administrar esas cotizaciones por 39 años, los cuales equivalen a 468 meses;
c)Que esta persona habría pagado hasta el 30 de abril de 2014 US$ 20,000.00 en concepto de comisiones, de los cuales US$ 10,000.00 se destinaron para el pago del seguro previsional y los otros US$ 10,000.00 para administrarle su cuenta individual (según ASAFONDOS la mitad de la comisión se destina al seguro previsional y la otra mitad es el ingreso para la AFP);
d)Al encontrarnos al 30 de abril de 2014 solo habrían transcurrido 192 meses de los 468 que durará el tiempo de la administración de su cuenta individual, por consiguiente, la AFP solamente habría devengado el 41.02% de los US$ 10,0000.00 de comisiones que le corresponden, por tanto, sus ingresos por este concepto deberían ser de US$ 4,102.00 y no de US$ 10,000.00 como se los permite la Superintendencia del Sistema Financiero.
3. Utilidades de las compañías de seguros
Pero no solamente las AFP obtuvieron importantes ganancias, también las compañías de seguros se beneficiaron en forma considerable con la emisión de las pólizas para cubrir los riesgos previsionales (invalidez y muerte de los afiliados al sistema), recibiendo, del año 2000 al 2014, US$601 millones de Dólares en concepto de primas. Para calcular la utilidad en este negocio se consideró como costo la siniestralidad promedio de las aseguradoras al 31 de diciembre de 2012, la cual es del 61% (dato obtenido de la Superintendencia del Sistema Financiero). Siendo así, las utilidades brutas de las compañías de seguros, para este caso, serían de US$234 millones de Dólares. Obviamente, a esa utilidad habría que restarle los costos de administrar ese negocio, los cuales seguramente no serán muy altos.
A continuación se presenta una gráfica con las primas anuales y seguidamente otra gráfica con el cálculo de la utilidad.
En total, la contribución de los trabajadores con las utilidades del sistema financiero fue de US$486 millones de Dólares, monto que está compuesto por las utilidades de las AFP más las utilidades de las compañías de seguros; sin embargo, se anuncia que cuando se jubilen recibirán pensiones insignificantes que los harán padecer de pobreza extrema en los últimos años de su vida.
4.Los costos de administración de las AFP
Un argumento infaltable en los promotores de las privatizaciones es la ineficiencia de las empresas públicas, este se hizo presente en el caso de las privatizaciones de los sistemas de pensiones en El Salvador; por esa razón es conveniente hacer una ligera comparación de los costos de gestión del Instituto Nacional de Pensiones de los Empleados Públicos (INPEP), respecto de las dos Administradoras de Fondos de Pensiones (CONFIA y CRECER). No se hizo una comparación de los costos de gestión del fondo de pensiones administrado por el ISSS, porque no se cuenta con la información necesaria.
La comparación que presentamos a continuación es de los últimos cuatro años de operación del INPEP (1994, 1995, 1996 y 1997), antes de que entrara en vigencia el nuevo sistema de pensiones en abril de 1998, respecto de los años 2009, 2010, 2011 y 2012, de operación de las AFP; los gráficos son más que elocuentes, en los cuales se pude advertir la falacia del argumento sobre la ineficiencia de las empresas públicas, al menos en cuestión de costos.
Sería un acto de ingenuidad admitir que los costos que presentan las AFP´s, son en realidad el resultado de la ineficiencia administrativa, si bien es cierto no interesa destacar que tampoco es cierto que la administración pública sea ineficiente, debemos tener presente que esos costos que presentan las AFP´s, están aumentados artificiosamente por razones tributarias.
Esos costos son el resultado de la elusión del impuesto sobre la renta, entendida esta como la práctica de ocupar los vacios legales para generar gastos superiores a los reales.
Un mecanismo recurrente para este propósito en las empresas de capital extranjero, son los gastos pagados a sus casas matrices por diferentes conceptos cobrados como prestación de servicios, los cuales generalmente son inexistentes o los precios son exorbitantes, comparados con los reales.
Estas prácticas en sustancia son extracciones de ganancias que no pagan impuestos.
También es de considerar los pagos de salarios altísimos y prestaciones sociales sustanciales a personal extranjero, en muchos casos.
Además de la posible elusión antes comentada, las AFP y las aseguradoras se valen de otras prácticas, poco éticas, para aprovecharse de los cotizantes, como por ejemplo:
a)Contratan pólizas para cubrir los riesgos de los cotizantes, con la comisión de los cotizantes, pero con beneficios para las AFP, por baja siniestralidad. Es como si un administrador de cosa ajena contrata pólizas, con descuento, para cubrir los riesgos de los bienes que administra, y se queda con el descuento.
b)Que se aproveche la prescripción mercantil de las pólizas de seguros, para negarle los beneficios del seguro a un beneficiario, por no presentar en tiempo el reclamo. Ocurre en algunos casos, que los beneficiarios o no se dan cuenta oportunamente de que son beneficiarios de un fallecido y no presentan el reclamo en tiempo o no pueden reunir la documentación necesaria para obtener el derecho, como el caso de juicios de identidad o reconocimiento de paternidad, etc.