Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
“La Asociación Pro-Búsqueda celebra 30 años de trabajo, de esfuerzo por apoyar a familias separadas de forma forzada de sus hijas e hijos durante el conflicto armado, y que exigimos la búsqueda de la verdad y justicia ante el Estado salvadoreño”, dijo Inés Durán, madre integrante de Pro-Búsqueda.
El pronunciamiento de Durán se dio en el marco del Trigésimo Aniversario de fundación de la Asociación de Búsqueda de Niñas y Niños Desaparecidos durante el Conflicto Armado y el Día Internacional de la Desaparición Forzada (ONU), día en el que cientos de familias aún buscan a sus hijos e hijas, y la exigencia de la aplicación de la justicia contra los perpetradores.
Madre Inés manifestó que son familias que emprendieron un camino de búsqueda, el cual ha estado “lleno de obstáculos y dolor”, pero que al final han tenido también “grandes resultados”, que ha marcado un cambio importante en la sociedad.
“Durante el conflicto y posterior a él, no se dio la importancia debida al tema de las vulneraciones que sufrieron las niñas y niños desaparecidos, fueron las familias quienes perdimos el miedo a buscar y denunciar. Y somos las que 30 años después de lograr algunos reencuentros, nos mantenemos de pie en una sola voz: hasta encontrar el último”, afirmó.
“Hasta conocer la verdad de los hechos, acceder a la justicia y lograr la respiración de los daños sufridos, pero también, exigir que el Estado promueva garantías constitucionales y jurídicas para que estas prácticas que atentan contra la vida no se vuelvan a repetir “, acotó Durán.
Pro-Búsqueda la integran más 900 familias, que buscan a niños y niñas, así como, víctimas directas de la desaparición forzada. Las que han logrado la resolución de 469 casos, luego de documentar 1,046 denuncias y 425 solicitudes de personas adoptadas en diversos países del mundo, quienes buscan a su familia biológica.
Familias siguen esperando una respuesta del Estado
Ana Julia Escalante, directora de Pro-Búsqueda, reafirmó que esto expresa el sentir de las familias que la integran y que exigían desde su nacimiento en 1994 el derecho de conocer el paradero de sus hijos e hijas. El cual, les ha sido negado.
“Por esta situación estas madres y padres que fueron cinco familias, allá por 1994, comenzaron a movilizarse ante juzgados e instituciones del Estado pidiendo apoyo para encontrar a sus hijas o hijos que les fueron arrebatados durante el conflicto armado, sobre todo, en operativos militares, y al darse los primeros reencuentros y la posibilidad de localizarles más familias comienzan a reunirse y organizarse”, reseñó.
“La desaparición es un flagelo que sigue existiendo a nivel mundial. Este día diversas organizaciones en distintos países, sobre todo, las familias exponen sus casos. Y Pro-Búsqueda no es la excepción y que hoy cumplimos 30 años de fundación, nos permite hacer una evaluación del recorrido y, sobre todo, de la tenacidad y valentía, especialmente durante estos 30 años que se han mantenido en pie de lucha exigiendo la verdad, la justicia y la reparación”, añadió Escalante.
No obstante, reconocen como Pro-Búsqueda la infinidad de obstáculos, opacidad de información y silencios gubernamentales de diferentes mandatos presidenciales, que restan la credibilidad a las obligaciones de un Estado democrático.
Entre las dificultades están “Las actitudes represivas del Estado, la difamación, el silencio cómplice, un discurso que deslegitima el honor de las víctimas, las prácticas de olvido y la falta de voluntad de devolver a las familias la verdad sobre los hechos ocurridos y que pasa por acceso a la información de instituciones que estuvieron involucradas en el conflicto”.
Niñez desaparecida es tema vigente no del pasado
Margarita Zepeda, del equipo investigador de Pro-Búsqueda, consideró que hablar de la organización es celebrar los 30 años de una lucha de miles de familias que buscan por sus medios a sus hijos e hijas desaparecidas en el conflicto armado o que fueron adoptados por otras familias fuera de El Salvador.
“A lo largo de 30 años de lucha, de investigación y superación de inconvenientes, de tropiezos, también hemos tenido logros dentro de todos los casos, que hemos recibido 1,046 casos y de estos 291 se han realizado los reencuentros, 89 de estos están pendientes de reencuentros”, señaló.
“De los 1,046 casos que vienen de 1994 contamos también con 425 casos de jóvenes que siendo niños durante el conflicto fueron adoptados en diferentes países del mundo. Y en los últimos 2 años, estamos registrando 25 casos nuevos de estos jóvenes que buscan sus raíces y de alguna manera creen que pueden ser niños desaparecidos porque desconocen de donde proceden y buscan a sus familias para conocer su origen”, indicó Zamora.
La Asociación Pro-Búsqueda reitera que continuará exigiendo la verdad, la apertura de archivos e información secuestrada por autoridades que se esmeran en ocultar y proteger los responsables de los hechos manteniéndolos en total impunidad.
Y mantener el compromiso con las familias que se suman a este caminar con esperanza, así como las personas que siendo niñas y niños sufrieron la desaparición o separación de sus familias biológicas y que esperan conocer sus orígenes e identidad que les fue negada.