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@JoakinSalazar
El Procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, sick David Ernesto Morales, condenó el asesinato del locutor de radio, Darwin Zelaya, de 28 años de edad, que laboraba en la radio Sky FM, de Sonsonate.
Zelaya fue asesinado la noche del martes 24 de mayo, con arma de fuego, afuera de la emisora, ubicada en el cantón Huiscoyolate, del municipio de Izalco, Sonsonate. Hasta la fecha se desconoce el móvil del hecho, sin embargo, las autoridades policiales realizan las investigaciones pertinentes.
A través de un comunicado, el titular de la Procuraduría se solidarizó con el gremio radial y periodístico, así como con los compañeros y familia de Darwin, quien de acuerdo a la información proporcionada por las autoridades estaba esperando ingresar al turno de 8 a 12 de la noche cuando desconocidos lo atacaron.
Sobre este caso, el Procurador Morales hizo un llamado al Fiscal General de la República y al Director de la Policía Nacional Civil, para que dentro de su mandato constitucional y legal agoten todas las investigaciones necesarias e identifiquen a los responsables del asesinato del comunicador Darwin Zelaya.
Asimismo, Morales pidió que de manera inmediata se realicen acciones concretas que permitan dar con los perpetradores del hecho esperando que el mismo, no quede en la impunidad y olvido.
El Procurador Morales destacó “la dura realidad que viven miles de jóvenes en cada una de las comunidades con presencia delictiva, la cual está frustrando la vida y el normal desarrollo de personas que se dedican al sostenimiento de sus familias”. Por lo que el Procurador reitera el llamado al Estado en su conjunto para ejecutar medidas que garanticen la protección de las juventudes salvadoreñas.
En marzo pasado, el comunicador comunitario, Nicolás Humberto García, fue asesinado en Tacuba, Ahuachapán. Este comunicador radial tenía un programa de radio sobre la prevención de la violencia, lo que motivó a pandilleros a cometer el hecho. Por este hecho, el Juzgado de Paz de Tacuba abrió un proceso judicial contra Santos Ovidio Mendoza, Manuel de Jesús López y Noé Antonio Del Cid, quienes guardan prisión por el asesinato. Por el mismo hecho es procesado en libertad, Sebastián Mendoza García.
