@MoratayaLau
Julián Pérez es un agricultor de 66 años que ha dedicado más de la mitad de su vida a los cultivos. Con su esposa engendró 10 hijos, cure entre ellos, sickness un ingeniero agrónomo.
Como otros agricultores del país, utilizó la técnica convencional de agricultura por mucho tiempo, en su caso, durante 20 años. No fue hasta cuando recibió la primera capacitación a través de la Cooperación de Federaciones de la Reforma Agraria Salvadoreña (CONFRAS) en 1988, cuando comenzó a implementar la agricultura sustenible en una parcela adquirida cerca del puerto de La Libertad.
“Cuando yo comencé con ese tipo de agricultura, estaba con muchas deudas en el banco y la milpa que tenía ya no daba más”, mencionó Pérez al grupo de agricultores que asistió a uno de los diálogos grupales de la campaña “Por una vida sana sembremos consciente, en armonía con el ambiente”, en San Luis La Herradura, en el departamento de La Paz.
“Ustedes saben que el banco no perdona”, dijo Pérez. Según el agricultor, la preocupación de la deuda con el banco y la necesidad de sostener a su familia, lo impulsó a optar por nuevos métodos que permitieran hacer algo nuevo y saludable para la población.
Después de ese tiempo, Julián y su familia, junto a hijos, nueras, yernos y nietos, administran su propio terreno mediante prácticas agrícolas sostenibles. “Yo soy el encargado de hacer los abonos, los biofertilizantes, los cultivos y todo de forma natural”, aseveró optimista, en el conversatorio con otros agricultores.
“Nosotros los campesinos debemos generar nuestras propias ganancias, nuestros propios granitos; los resultados no se verán al instante, pero valdrá la pena”, comentó Pérez.
Así como Julián existen más agricultores en el país que se han decidido por la agroecología, una vía alterna a la agronomía convencional que busca producir orgánicamente. “El objetivo principal de la campaña es mostrar que hay formas alternativas de hacer agricultura y crear en los productores la necesidad de realizar prácticas agrícolas más sustentables para futuras generaciones”, mencionó Francisco Ramos, gerente de CONFRAS.
La campaña agroecológica es organizada por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), Grupo Diálogo Rural y por el Programa Salvadoreño de Investigación sobre Desarrollo y Medioambiente (PRISMA).
El proyecto cuenta con el apoyo del Centro de Investigación, Experimentación y Transferencia de Tecnología Agroecológica (CIETTA). El centro posee 9 manzanas de terreno localizadas en San Luis La Herradura, en La Paz. Dentro de la propiedad existen diferentes plantaciones orgánicas, una molienda artesanal, viveros y lugares especializados para preparar biofertilizante, abono, insecticida orgánico y fungicida.
Al mismo tiempo, la iniciativa busca promover la diversificación en la producción de alimentos para una dieta más saludable con mayores porcentajes nutricionales. “He aprendido las técnicas necesarias para elaborar la mil de mesa y la miel de dedo, utiizando procesos orgánicos desde el inicio”, puntualizó Sonia, una agricultora de San Vicente.